_
_
_
_
EL MANILLAR
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

La cantera descuidada

En España se accede al ciclismo profesional por currículo: tantos triunfos tiene un aspirante, tanto valor tiene en el apretado mercado. La mayoría de las veces, se premian menos las trayectorias que las victorias, una injusticia que cuando no frena en seco la carrera de ciclistas válidos les obliga al exilio.

La opción del viaje exige al que prepara las maletas grandes dosis de confianza en sus aptitudes. Es el caso del líder de la Vuelta al País Vasco, Igor Astarloa, pero también de Iñigo Chaurreau y de Juanma Gárate (ambos presentes en esta carrera) o de Jon Odriozola, por citar los casos más recientes. Todos estos saltaron al profesionalismo desde Italia, hartos de mover su currículo en los despachos de los conjuntos españoles. Chaurreau y Odriozola fueron reclamados de regreso por Euskaltel y Banesto, respectivamente. Gárate, en las filas del Lampre, está dispuesto a seguir en Italia, con su actual formación, que ya le ha asegurado la renovación. Estos casos revelan dos evidencias: la lista de aspirantes al profesionalismo es proporcionalemente inversa a las plazas disponibles; y, sobre todo, que el seguimiento de la cantera ciclista, prácticamente inexistente, entrega al azar el futuro de los jóvenes ciclistas. Ni Odriozola ni Chaurreau se revelaron como ganadores en su época amateur, pero ahora son ciclistas fundamentales en sus respectivos conjuntos. Astarloa sólo ganó una carrera en su última campaña como aficionado, en Italia, aunque se hinchó a figurar entre los diez primeros: ahora es el primer líder vasco de la prueba desde 1990.

La semana pasada se celebró en Eibar el Memorial Valenciaga, probablemente la prueba más prestigiosa del calendario amateur. Aprovechando la inminencia de la vuelta, varios directores se acercaron hasta la localidad guipuzcoana, en un gesto más lúdico que efectivo. Los que trabajan con los jóvenes lamentan la falta de comunicación con sus colegas profesionales y aseguran que prima lo espontáneo sobre el seguimiento serio y continuado.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_