De Gispert entierra el 'informe Roca' sobre el modelo territorial

De Gispert rechazó la fusión de municipios propuesto en el informe -una sugerencia que levantó ampollas en los pequeños municipios, en su mayoría gobernados por CiU-. Pero fue más allá: incluso propuso descartar, por inviable, la propuesta de creación de seis veguerías como fórmula para superar el actual sistema provincial sin modificar la Constitución.

El informe técnico fue aprobado en su día por unanimidad, si bien todos los partidos expresaron reticencias. Pero su mera elaboración era exhibida como una muestra del talante dialogante de Duran Lleida, quien para subrayar este extremo encargó la coordinación del texto al ex secretario general de Convergència Democràtica (CDC) Miquel Roca.

El informe sirve como base de debate en la comisión parlamentaria formada en el Parlament para diseñar un nuevo sistema de organización territorial. Ayer, De Gispert anunció el compromiso de su gobierno de dar un nuevo impulso a los consejos comarcales como el principal nivel de descentralización de la Generalitat, a pesar de que el informe técnico se planteaba los consejos como un órgano supramunicipal y reservaba a la veguería el papel clave para descentralizar la Administración.

La consejera reconoció que el informe de expertos se había redactado por consenso, pero con un coste elevado: '[El texto] contenta a todos los partidos en algunos aspectos, pero probablement no contenta totalmente a ninguno de los grupos', afirmó.

'El informe puede servir para el debate parlamentario de futuro, pero no determina una nueva organización territorial', subrayó De Gispert, que utilizó una argumentación muy similar a la mantenida hasta la fecha por algunos alcaldes y la Asociación Catalana de Municipios (ACM), en la órbita de CiU.

Identidad

'Tenemos claro que debemos defender la identidad del pequeño municipio' aseguró De Gispert. Y añadió: 'El sentido de identidad no se puede perder por razones de eficacia'.

La supresión de los municipios con menos de 250 habitantes, como sugería el documento, puso en pie de guerra a buena parte de las bases tradicionales de CiU. Pero incluso el Partit dels Socialistes (PSC) ha expresado solemnemente que el plan de fusiones sugerido por el informe Roca no es imprescindible para acometer la reforma del modelo territorial.

De Gispert consideró que a los expertos 'les ha faltado escuchar al territorio' y anunció que a finales de abril iniciará una ronda de reuniones con los alcaldes de cada comarca para percibir las sensaciones que le llegan desde las zonas afectadas. Tras estas visitas, que se pueden alargar hasta final de año, De Gispert se compromete a emitir una posición única del Gobierno sobre el modelo de organización territorial.

La consejera de Gobernación descartó la creación de veguerías porque la alteración del mapa provincial es una competencia exclusiva del Congreso de los Diputados. En la presentación del informe, Miquel Roca -uno de los redactores de la Constitución- aseguró que las modificaciones sugeridas son perfectamente posible sin alterar la Carta Magna, pero no escondió que era necesario contar con el respaldo del PP, que tiene mayoría absoluta en el Congreso.

'Ahora no es el mejor momento para provocar un cambio [en el sistema provincial]', subrayó De Gispert para justificar su posición.