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Reportaje:

75 años de cultura y avatares en la calle de Alcalá

El edificio del Círculo de Bellas Artes celebra tres cuartos de azaroso siglo desde que lo inauguró Alfonso XIII

Muchos avatares ha sufrido, y resistido, el edificio del Círculo de Bellas Artes desde que Alfonso XIII lo inaugurara el 8 de noviembre de 1926 para trasladar allí la institución cultural desde su anterior sede. Antonio Palacios fue 'el arquitecto del magno edificio', y asistieron a la 'multitudinaria' fiesta de apertura 'el presidente del Gobierno, general Primo de Rivera, y la totalidad de los socios, así como todo el Madrid social y artístico, más de 5.000 personas, que hicieron materialmente imposible dar un paso'. Así describió este primer día del edificio de Alcalá, 42, José Luis Temes en su libro El Círculo de Bellas Artes de Madrid, 1880-1936. No todo fueron parabienes; por ejemplo, a Federico García Lorca no le gustó. 'A Babilonia antigua has resurrecto', decía el poeta al arquitecto en un soneto donde describía el edificio como 'pomposa masa de blancura al firmamento para hacer competencia con el día'.

Desde entonces han transcurrido casi 75 años con todos sus días, algunos muy 'oscuros', a juicio de su actual presidente, Juan Miguel Hernández de León, que ayer presentó todos los proyectos y actividades que se celebrarán con motivo de este 75 cumpleños del inmueble.

Días oscuros como los que transcurrieron durante la guerra civil, cuando el edificio se convirtió en una checa (cárcel política), y los años del franquismo. Entonces fue un antro de juego donde se apostaban al póquer sumas millonarias en timbas montadas por capitostes, la mayoría simpatizantes de la dictadura, mientras los artistas 'subían los cinco pisos de escaleras para pintar el único desnudo permitido', según comentan algunos de los creadores que aparecen en el vídeo documental filmado para la ocasión por Javier Rioyo y José Luis López Linares. Ahora es el momento de 'asumir un nuevo reto', continuó Hernández de León, 'sin renunciar a la memoria, pero aprovechando las nuevas tecnologías y los aspectos más críticos de la cultura contemporánea'.

Después de los años de casino, 'no legal, pero sí tolerado', como recordó en el vídeo el actor Manuel Alexandre, habitual en esas mismas timbas y habitual ahora en la vida cultural de la nueva etapa del Círculo, llegó la transición. El edificio, antes 'inaccesible' -'veíamos a los señores en la cafetería, llena de ventanales, como seres nadantes en La Pecera', recordaron en el vídeo- se abrió a la vida cultural madrileña. Era entonces ministro de Cultura el socialista Javier Solana, y, tras una aciaga asamblea en la que alguno de los antiguos socios llegó a entrar 'con pistola al cinto', la Plataforma de Salvación del Círculo convocó en 1983 una multitudinaria fiesta de asociación. En ella, tras pasar por un fotomatón, se convirtieron en socios 'más de 3.000 personas' de la parte progresista de la sociedad de entonces. 'Fue una especie de toma de la Bastilla'.

Luego vinieron las crisis económicas, que comenzaron a remitir tras un drástico plan de saneamiento, hasta que en 1998 los ingresos comenzaron a superar los gastos. En esta recuperación tuvo mucho que ver la participación de diversas empresas privadas.

La celebración del aniversario en sí tendrá lugar entre los meses de septiembre y diciembre. El plato fuerte será la exposición dedicada a Antonio Palacios, 'autor de la mayoría de los iconos urbanos de la capital', en opinión del presidente de la institución. 'No se puede entender el desarrollo urbano de Madrid sin la figura de este arquitecto, nacido en Galicia pero que, como tantos otros, vino de fuera para incorporarse a la cultura de la ciudad', destacó Hernández de León. 'No será una exposición arquitectónica al uso, con profusión de planos y alzados, sino un gran espectáculo sobre su presencia en lo madrileño', advirtió.

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Para la ocasión, el Círculo estrena además un logotipo, que no debe recibir este nombre, sino el de 'medalla', según el autor del diseño, Alberto Corazón. 'Hemos hecho un ejercicio de memoria, recuperando elementos fundacionales del Círculo', afirmó el artista, que también está trabajando en una renovación de la 'señalización, los equipamientos y amueblamientos', además de 'la imagen del Círculo en el exterior'. 'No se trata de modernizarse, sino casi de lo contrario', explicó Corazón. 'Está pendiente la construcción de una identidad sólida de esta institución, que se ha ido acomodando a los avatares de cada momento, como un reflejo del azaroso destino de la historia de España'.

Además, con motivo del 75º aniversario de su sede y de la entrada en el nuevo siglo, el Círculo de Bellas Artes convocará una serie de jornadas sobre ciencia en las que se tratarán aspectos sobre la biología contemporánea, 'de manera que se vaya corrigiendo la distancia entre la cultura y la ciencia', adelantó el presidente.

El apoyo a los jóvenes creadores se concretará en la convocatoria de becas para artistas residentes, no sólo en todas las comunidades autónomas españolas, sino también en Portugal. Las artes plásticas, los audiovisuales, las creaciones multimedia, la arquitectura, la fotografía y la música son las disciplinas artísticas a las que se dedicarán estas becas, de dos meses de duración y con una dotación de hasta 100.000 pesetas mensuales.

El Círculo de Bellas Artes tuvo su primera sede, en 1880, en la calle del Barquillo. Allí acudían los primeros 267 socios. 'Ahora es un referente imprescindible en la vida cultural madrileña: por sus escaleras te cruzas con artistas, actores, cineastas', se dice en el vídeo. En cuanto a la fama del edificio, 'no hay más que decirle a un taxista, desde cualquier punto de Madrid: 'lléveme al círculo de Bellas Artes', y no pregunta más'.

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