El método gallego sobre la sucesión

Mariano Rajoy no aclarará cuáles son sus intenciones sobre la sucesión de José María Aznar como candidato a La Moncloa hasta 2003. El vicepresidente primero del Gobierno facilitó ayer todo un manual de sus proclamadas respuestas políticas de gallego para salir del 'enredo' en el que le quisieron meter varios periodistas tras el Consejo de Ministros.

Rajoy aseguró entonces que ante ese dilema ha patrocinado 'un método' que consiste en no decir ahora si quiere o no quiere estar en esa carrera, en no precisar si se excluye o no. 'No revelaré cuáles son mis esperanzas, temores, lo que albergo o lo que dejo de albergar'. Confesó que claro que tiene una opinión al respecto, aunque naturalmente nada avanzó sobre ella.

Rajoy cree que 'no hay otra forma' de afrontar esa cuestión, en la que 'conviene no enredar', porque en caso contrario 'estamos siempre en el mismo o parecido lío'.

En tono relajado, incluso facilitando las bromas, Rajoy interpeló a un periodista que le interrogó sobre la sucesión de Aznar y la relevancia de los dos vicepresidentes, él mismo y Rodrigo Rato: 'No interprete usted que yo no quiero responder; quiero responder en 2003 y creo que me entiende, entre otras cosas, porque si usted fuera yo, usted diría lo mismo; en el bien entendido de que, si yo fuera usted, también preguntaría lo mismo'.

En otro momento en el que se le planteó si Rato estaba rehabilitado tras explicar Aznar que le había ofrecido hace un año el puesto de vicepresidente que ahora ostenta Rajoy, éste replicó: 'Siempre ha estado rehabilitado; ayer, hoy, anteayer... y mañana también'.

Para rematar el buen humor de la sesión, el ministro portavoz, el también gallego Pío Cabanillas, reconstruyó toda una teoría sobre la sucesión relacionada con el futuro de los equipos españoles de fútbol que permanecen en la Copa de Europa: Real Madrid, Deportivo de La Coruña y Valencia.