Cruz Roja exige a la Organización Mundial del Comercio que busque 'solución a la tragedia'
La Cruz Roja tomó posición ayer en el conflicto de los genéricos para el Tercer Mundo y defendió su uso ante las grandes epidemias. 'El sida y las enfermedades infecciosas oportunistas constituyen una emergencia de salud pública a escala mundial, que ha costado ya millones de vidas. A la Organización Mundial del Comercio (OMC) le cabe la responsabilidad de encontrar una solución adecuada a esta tragedia: si las demandas presentadas contra Suráfrica y Brasil tienen éxito, las medidas de urgencia previstas en el marco de la OMC para emergencias de salud pública perderán toda validez', señaló ayer en Ginebra la presidenta de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, Astrid Heiberg.
Cruz Roja calificó de 'inaceptable'el precio de los medicamentos para los países en vías de desarrollo e hizo un llamamiento a sus 176 sociedades nacionales para ayudar a países como Suráfrica a encontrar 'soluciones satisfactorias'.
La organización proclamó la urgencia de anteponer 'las exigencias humanitarias a intereses comerciales' cuando 'se trata de salvar vidas'. 'Las modalidades actuales de distribución de recursos y de imponer precios a los medicamentos son inaceptables y deben ser redefinidas, pues privan a la inmensa mayoría de las personas afectadas por el sida de cuidados y tratamientos adecuados. Todos los días muere gente de sida, de malaria, de tuberculosis y de otras enfermedadesinfecciosas, sencillamente porque no tienen acceso a determinados medicamentos: es absolutamente inaceptable', dijo la presidenta de Cruz Roja.
Por otra parte, Médicos Sin Fronteras (MSF) lanzó ayer en España una campaña de firmas por Internet (www.msf.es) en apoyo del Gobierno surafricano y para exigir que las multinacionales farmacéuticas retiren la demanda. La campaña durará hasta el 15 de abril, tres días antes de la reanudación del juicio. A escala internacional, MSF ha pedido a la universidad estadounidense de Yale, que posee la patente de uno de los fármacos del cóctel antisida, el Zerit o estavudina, para que permita a Suráfrica importar una versión genérica. La universidad, escudándose en su contrato con la multinacional Bristol-Myers, rechazó la solicitud de MSF, aunque el pasado viernes un comunicado oficial señaló que Yale había levantado todos los obstáculos a Bristol-Myers para que el fármaco se pudiese adquirir en Suráfrica.
Un grupo de estudiantes de derecho de Yale, al criticar lo que califican de 'complicidad' entre la universidad y la multinacional, anunció que ejercerá medidas de presión y calculó en 6.800 millones de pesetas al año los beneficios generados por la patente.
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