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OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Situación insoportable

Escribo esta carta como última opción antes de llegar a los tribunales, o a donde sea necesario, dada la inoperancia del Ayuntamiento de Ciempozuelos. Vivo en una vivienda unifamiliar adosada en Ciempozuelos.

El problema es el siguiente: la planta semisótano de la casa se inunda cada vez que hay una fuerte tormenta, porque el alcantarillado va a parar a un pozo negro en lugar de a una red municipal de alcantarillado correcta; dicho pozo negro no tiene la suficiente profundidad y, cuando llueve en gran cantidad y hay tormenta con aparato eléctrico, se va la luz, con lo que la bomba de achique deja de funcionar; pero hemos comprobado que, aunque no se vaya la luz, dicha bomba no es suficiente cuando llueve en gran cantidad porque el diámetro de la tubería de salida es muy pequeño; esto causa que rápidamente se llene el pozo negro y, una vez rebosa el agua, éste revierte las aguas fecales a las viviendas saliendo por los sumideros de los garajes y adquiriendo una altura de 15 a 25 centímetros.

Este hecho puntual ha ocurrido hasta ahora muchas veces; la primera vez fue aproximadamente entre agosto y septiembre del año 1997; ni la constructora ni el promotor dieron constancia del hecho a los compradores de las viviendas.

Nosotros adquirimos la vivienda en abril de 1997 y empezamos a vivir en noviembre de ese año. La segunda vez que ocurrió este hecho fue en enero de 1998; esta vez se hizo responsable el promotor de la venta de la vivienda, puesto que los terrenos (donde se encuentra el pozo negro) del alcantarillado todavía no habían sido cedidos al Ayuntamiento. En ese momento se nos aseguró que no se volvería a producir el hecho y el promotor puso de su bolsillo una solución: cogió una contrata (del mismo pueblo) para que, cada vez que lloviera, subieran unos operarios y, en caso de ser necesario, pusieran en funcionamiento otra bomba de reserva para ayudar a la que ya está.

Posteriormente, dicha persona cedió los terrenos al Ayuntamiento y, o bien este organismo no tenía constancia de dicho problema, o bien no lo estimó importante, puesto que, con fecha domingo 13 de junio de 1999, hubo una tormenta por la tarde y volvió a ocurrir lo mismo.

Actualmente tiene más que de sobra conocimiento de este problema. A partir de esta fecha se nos han vuelto a inundar los garajes tantas veces que no podemos hacer un seguimiento de fecha, aunque se han puesto denuncias en la Policía Municipal. El mayor miedo que nos da es que un día la tormenta sea muy intensa: ¿qué pasará entonces con nuestra integridad física, ya que actualmente somos padres de un bebé de un mes de edad?-

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