El primer paso de las víctimas
El Centro de Mujeres 24 horas funciona en Valencia desde 1994 y en Castellón y Alicante desde 1997. Es un lugar donde puede acudir, según su coordinadora Lolis Prats, 'cualquier mujer que sufra malos tratos físicos, psíquicos, abuso sexual, agresión o acoso'.
Para ello, el centro está abierto de forma permanente con una trabajadora social, una psicóloga y, de lunes a viernes, con una abogada'. 'Normalmente llegan muy asustadas, intentamos tranquilizarlas y diagnosticamos si es necesario llevarlas a un hospital, a comisaria o al juzgado. En función de la peligrosidad en que se encuentren podemos mandarla a una casa de acogida porque muchas no pueden volver a su casa ni a su barrio', explica.
La presencia de la abogada es fundamental 'porque muchas veces, poner la denuncia a las pocas horas de abandonar su casa, no es conveniente porque tienen una visión sesgada de lo ocurrido. Algunas veces es mejor esperar unos días antes de presentarse ante el juez', indica.
Lolis Prats cree que 'la educación y el respeto a las personas es fundamental para que estas cosas no ocurran'. 'Por desgracia', incide, 'hasta que el hombre no admita la igualdad de sexos y deje de considerar a la mujer como un objeto de su propiedad, tendremos que seguir aquí'.
En el Centro se decide si es conveniente que la mujer vaya a una de las tres casas de acogida que tiene la Generalitat en la Comunidad Valenciana, o a alguno de los 14 locales más que existen entre pisos tutelados, y residencias para mujeres de exclusión social'.
En Valencia, el Centro de la Mujer se encuentra en en el número 4 de la calle Salvador Giner, justo al lado de la Plaza de Na Jordana y también se puede contactar con ellas a través del teléfono gratuito 900 58 08 88.
En el año 2000 han pasado por los tres centros de 24 horas de la Comunidad Valenciana un total de 2.139 mujeres; de éstas, 840 denunciaron su situación a la policía y 135 ingresaron en casas de acogida.
Pero el problema viene cuando las víctimas, en lugar de dirigirse al centro de la mujer, van directamente al juzgado a interponer la denuncia. Allí se encuentran solas, sin el apoyo de ningún profesional que pueda ayudarlas y asesorarlas en esos momentos tan duros. Por eso, el decano de los juzgados de Valencia, Fernando de Rosa, pedía al presentar la memoria del año 2000 que se intensifiquen las medidas cautelares y de protección de la mujer en los juzgados y así poder evitar que disminuyan las denuncias porque 'las víctimas de la violencia doméstica, que en 1998 dieron el gran paso, no tienen la respuesta que se merecen' y prepara un plan de choque para el año 2001 con el objetivo de 'volver a recuperar la confianza de las mujeres maltratadas'.
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