Rato plantea abandonar el debate sobre el poder adquisitivo de los salarios

El debate sobre la capacidad adquisitiva de los salarios ha de pasar a la historia en un mercado laboral 'moderno y flexible' como el que el ministro de Economía, Rodrigo Rato, se propone conseguir. Aunque los salarios crezcan menos que la inflación, esa pérdida se compensa porque algunos servicios, las hipotecas y los impuestos han bajado, explicó Rato. Insistió en la moderación salarial para lograr que la inflación española esté a sólo medio punto de la europea.

La inflación ha sido la variable 'menos satisfactoria' de la economía española en los últimos años, empezó por reconocer ayer Rato durante la clausura de unas jornadas organizadas por la Fundación ICO. Pero esa tendencia se ha empezado a corregir 'claramente' en los últimos meses y, por ello, los agentes sociales cometerían 'un grave error' si fijasen sus precios y salarios 'mirando hacia el pasado y no hacia el futuro'.

Esa advertencia del vicepresidente segundo del Gobierno se produce después de que el Banco de España diera a conocer que en los primeros convenios de este año el aumento salarial pactado supera el 4%, cuando el objetivo oficial de inflación es el 2%. Y sale a la luz en un momento delicado tras la ruptura del diálogo social y la aprobación por parte del Gobierno de la reforma laboral.

Rato habló con más contundencia de la habitual en los últimos meses sobre el problema de la inflación y del mercado laboral 'moderno y flexible' que se propone conseguir. Ese nuevo paso en la reforma laboral debería tener en cuenta, según Rato, la competitividad de los sectores, la rentabilidad de las empresas, el empleo y fórmulas que permitan negociar salarios diferidos (planes de pensiones).

Dejó claro que los salarios no han de pegarse a la inflación como garantía de mantenimiento del poder adquisitivo. 'La sociedad española ha de ir abandonando ese debate', aseguró, ya que existen ahora compensaciones suficientes en el caso de que se produzca una desviación sobre el objetivo inicial.

Citó el abaratamiento del coste de las telecomunicaciones o la electricidad, así como la rebaja fiscal que se aplicó en 1999 y la prevista para 2003. Añadió que los tipos de interés están por debajo de lo que la situación española requeriría y eso permite, por ejemplo, que las hipotecas sean más baratas. 'Con la inflación al 2% o el 3% el poder adquisitivo no está en peligro', aseguró.

Rato dio así más argumentos para insistir en la moderación salarial: 'Una equivocada estrategia de precios y salarios haría más corto el ciclo de crecimiento de la economía española y afectaría a la creación de empleo'. Su objetivo es que el diferencial de inflación con los demás países del euro se acorte hasta situarse a medio punto. Ahora está en 1,4 puntos.