'Gospel', derviches bosnios y una muestra culinaria, en el Festival de Músicas Religiosas del Mundo de Girona

La segunda edición del Festival de Músicas Religiosas del Mundo, que se celebrará del 29 de junio al 8 de julio en Girona, supone un paso firme hacia la consolidación de un evento musical sin parangón en Europa. Espoleados por la buena acogida de la pasada edición, sus organizadores incrementarán el presupuesto, las fechas y el número de conciertos. El festival seguirá buscando el cobijo de la catedral: las actuaciones más destacadas tendrán como marco la imponente escalinata barroca, su nave gótica acogerá conciertos de voz y órgano, y ante la entrada lateral de la seo, en la plaza de los Apòstols, se instalará un mercado culinario donde degustar manjares de todo el mundo. Conferencias, exposiciones, cursos y talleres configurarán las actividades paralelas de 10 días marcados por la multiculturalidad.

En los conciertos programados se encuentran representadas algunas de las más importantes confesiones religiosas del mundo, entre las que se incluyen la musulmana, la hindú, la judía y la cristiana. El director del festival, Josep Lloret, aludió al concierto inaugural del Ensemble Nesidu-I-Huda, de Bosnia, un grupo de derviches de Sarajevo que ha conseguido subsistir en un contexto de luchas fratricidas. La representación cristiana más relevante vendrá de la mano del bajo barítono Simon Estes, que interpretará espirituales, gospel y arias de ópera de carácter religioso, y de Musica Reservata, grupo especializado en la música del Renacimiento, que será dirigido por Andrew Carwood. Esta formación incluye en su programa una obra recuperada perteneciente a la Capella de Música de Girona, de los siglos XVII y XVIII.

El repertorio de conciertos en las escaleras de la catedral se completa con Faiz Ali Faiz & Rehmad Ali Qawwals, del Panjab (Pakistán); el Grupo de Percusiones de los Templos de Kerala (India); el Coro Philippópolis (Bulgaria), que interpretará cantos litúrgicos ortodoxos del patriarcado de Serbia; Sheikh Ahmed Muhammad Barrayn & Ensemble (Egipto), dedicado a la música religiosa del Alto Egipto, y Sor Keyrouz & Ensemble La Paix (Líbano), una monja libanesa con importantes conocimientos musicológicos capaz de acercar la música de Oriente Próximo al clasicismo occidental. En el interior de la catedral tendrán lugar conciertos de canto gregoriano, órgano y diversas composiciones del Barroco y el siglo XX.

El festival tiene un presupuesto de 63 millones de pesetas. Los precios de las entradas rondarán las 3.000 pesetas por concierto, con la posibilidad de adquirir abonos.