Protesta de miles de profesores rusos para pedir salarios dignos
Hartos de malvivir como en tiempos de posguerra, miles de profesores de toda Rusia interrumpieron la pasada semana sus clases para reclamar salarios más dignos que los 1.300 rublos (unas 8.000 pesetas) que cobran de media al mes, a menudo con mucho retraso. Los manifestantes firmaron una declaración destinada al presidente ruso, Vladímir Putin, en la que piden que se doblen sus salarios, que no llegan al mínimo, y una reforma educativa.
'¡Ni siquiera en los tiempos de posguerra los profesores vivían así!', ha declarado Vladímir Yákovlev, presidente del sindicato de profesores y científicos de Rusia. Yákovlev criticó que, en la actual coyuntura de bonanza económica, Putin haya olvidado las promesas que hizo antes de ser elegido presidente de Rusia, el 26 de marzo del año pasado.
La protesta se extendió desde la costa este, en la zona de Primorie, donde 20.000 profesores hicieron paros parciales, hasta Altái, en el sur de Siberia, donde se manifestaron 22.000 educadores, y Chita, también en Siberia, donde participaron cerca de 40.000.
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