El TSJ exige a Sanidad que ejecute la sentencia europea de los médicos de atención primaria que trabajan a turnos

La sala de lo social del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) ha dictado un auto por el que exige a la Consejería de Sanidad que reconozca la condición de trabajadores a turno de los médicos de atención primaria. Dicho reconocimiento ya fue determinado por una sentencia del Tribunal de Luxemburgo del 3 de octubre del año pasado después de que el Sindicato de Médicos de Asistencia Pública (Simap) denunciara la difícil situación laboral de los médicos de la sanidad pública. El reconocimiento de los médicos como trabajadores a turno supone que éstos, antes de que se incorporen a este tipo de jornada y cada vez se modifiquen las condiciones de las guardias, deben quedar sujetos a las medidas de especial protección establecidas por la directiva europea referida a la protección y la seguridad de los trabajadores. Unas normas que en ningún caso, y según la propia directiva, pueden quedar limitadas a cuestiones de carácter económico. La directiva establece para los trabajadores a turnos, aunque siempre de forma general, una reducción de su jornada máxima anual, así como medidas especiales de seguridad para los médicos que visitan a pacientes a altas horas de la madrugada o en lugares conflictivos, mecanismos orientados a facilitar la manutención y el descanso en aquellos centros donde se ejercen turnos de 24 horas seguidas.

El auto del TSJ entiende que la sentencia en el caso de los médicos valencianos es perfectamente ejecutable por parte de la Administración y que una demora en la ejecución de la misma sólo puede admitirse en el caso de que éste muy justificada.

El próximo día 29 de marzo representantes de la Consejería de Sanidad y del Simap deberán ponerse de acuerdo ante la sala de lo Social del TSJ sobre cuáles han de ser las medidas a tomar para hacer efectivo el cumplimiento de la sentencia.

Por otra parte el TSJ requerirá en el plazo de 30 días, contables desde el día de ayer, al consejero de Sanidad, Serafín Castellano, para que informe sobre el 'estado del cumplimiento de la sentencia'.