Espinàs descubre parte de Extremadura en la 13ª entrega de sus viajes a pie

Sin voluntad alguna de ejercer de entomólogo o de botánico, según él mismo asegura, Josep Maria Espinàs (Barcelona, 1927) emprendió de nuevo el verano pasado un viaje a pie. En esta ocasión se dirigió a la región de Las Villuercas y Los Ibores, donde peregrinó durante 10 días. El resultado acaba de salir a la calle, lleva por título A peu per Extremadura y ha sido editado por La Campana.

A peu per Extremadura es el decimotercer libro de esta misma serie, que el autor inició hace ya 45 años. Normalmente Espinàs sigue un recorrido escogido por instinto, aunque esta vez se dejó aconsejar por un catedrático de la Universidad de Cáceres, quien le condujo hacia la exploración de Las Villuercas y Los Ibores. Es un territorio con un gran valor geográfico y donde la agricultura aún funciona a la vieja usanza, se conserva bien la arquitectura popular y abundan tanto el agua como la vegetación.

'No me siento como un notario de una realidad ni de unas formas de hablar que se están perdiendo', dijo Josep Maria Espinàs en la presentación del volumen, que se celebró la semana pasada en Barcelona. En todo caso, añadió su editora, Isabel Martí, que realizó parte del viaje con el escritor y con Sebastià Alquézar, 'este valor antropológico quizá crece con el tiempo'.

La transcripción de sus recorridos a pie no son libros de viaje al uso. Se concentran, sobre todo, en las personas, en conversaciones, anécdotas, en una observación minuciosa e interesada del paisaje y de las gentes que lo pueblan.

Presencia humana

Es el 'método Espinàs', como lo calificó el periodista y escritor Joan Barril, que acompañó a Espinàs en la presentación del volumen. Éste se basa en 'esperar la presencia de la figura humana, una espera que se ve recompensada por la buena literatura'. A juicio de Barril, que aseguró seguir el método a rajatabla, Espinàs es un 'cronista que en pocas palabras consigue crear un universo mental que da al lector una tranquilidad de espíritu enorme'.

Es la tranquilidad que da, lógicamente, el hecho de caminar de un sitio a otro, lo que confiere un ritmo determinado a sus libros. 'Creo que el espacio que crea el ritmo hace que la mayoría de lectores se apunten a cada nuevo libro', afirmó Espinàs. El escritor empezó la serie en 1956, con A peu pel Pallars i la Vall d'Aran. Continuó en los años siguientes por el Priorat y la Segarra. Siguieron la Terra Alta, el Alt Maestrat, el Matarranya, entre otros, y en los últimos años ha empezado a descubrir Castilla, el País Vasco y, ahora, Extremadura, en donde ha evitado, cuenta, los monumentos y los lugares más turísticos. El objetivo es conocer al otro: 'Siempre he considerado que la famosa frase 'Conócete a ti mismo' tiene algún componente suicida', agregó el escritor.

El alcalde de L'Hospitalet de Llobregat, Celestino Corbacho, extremeño de nacimiento y catalán de adopción, que asistió también a la presentación, dijo que la lectura del nuevo libro de Espinàs le ayudó a 'redescubrir el paisaje humano' de su niñez.