La inflación se sitúa en Francia en el 1,2% tras un fuerte retroceso en enero
Los precios en Francia cayeron el mes pasado un 0,4%, frente a la mayoría de los países europeos, donde la inflación lleva tiempo sin bajar. El índice de precios al consumo (IPC) se situó en el 1,2% interanual. Mientras, Italia alcanzó en el mismo mes una subida del 0,4%, lo que sitúa el IPC interanual en el 3%. Este aumento es el más alto desde septiembre de 1996. Tampoco los precios tuvieron un buen comportamiento en Alemania, donde alcanzaron su peor nivel desde diciembre de 1994.
Enero fue un buen mes para la inflación en Francia, según los datos del Instituto Nacional de Estadística. La caída del 0,4% ha situado el IPC interanual en el 1,2%. El instituto justifica el retroceso de los precios por el buen comportamiento de los productos petrolíferos, que cayeron un 4,8%, y por el efecto de las rebajas. No obstante, la inflación subyacente (descontados los alimentos, la energía y ciertas tarifas de servicios públicos e impuestos) aumentó el mismo porcentaje que bajó el índice ordinario: un 0,4%. En un año, la inflación subyacente se incrementó un 1,4%.
El crecimiento de la economía francesa también ha registrado resultados positivos, aunque menos espectaculares. El producto interior bruto (PIB) creció un 3,2%, al igual que en 1999 y una décima menos que en 1998, según los datos provisionales del Instituto Nacional de Estadística. El consumo de los hogares, uno de los elementos que más condicionan el PIB, se ralentizó levemente, al crecer un 2,3% frente al 2,7% de 1999. Este parón se debió fundamentalmente a la estabilización de las compras de automóviles. El Reino Unido creció un 0,3% en el último trimestre de 2000 y un 2,5% en un año, según los datos de la Oficina Nacional de Estadísticas.
Sube el coste de la vida
Otros países resultaron menos afortunados, especialmente en lo relativo a la inflación. En Italia, se confirma el aumento imparable del coste de la vida. Los datos del Instituto de Estadística (Istat) publicados ayer colocan en el 3% la inflación correspondiente al mes de enero. El aumento de los precios al consumo es el más alto desde septiembre de 1996. Con respecto a las cifras de diciembre, la inflación ha sufrido un repunte del 0,4%, lo que confirma también la inquietud de la patronal italiana, convencida de que el país está perdiendo competitividad en relación con los cuatro grandes de la Unión Europea. Los aumentos coyunturales más significativos se han producido en el capítulo recreativo, de espectáculos y cultura (un 1,9%), otros bienes y servicios y sanidad.
El dato de inflación de enero es preocupante, sobre todo porque el crecimiento de la economía italiana está entre los más bajos de la UE. El año pasado el crecimiento fue del 2,8%, un porcentaje que nadie espera alcanzar en 2001, pese al optimismo del Gobierno.
En Alemania, la inflación ha alcanzado en febrero niveles desconocidos desde diciembre de 1994, según datos provisionales de la Oficina Federal de Estadísticas de Wiesbaden. El IPC creció un 0,6%, lo que sitúa la subida anual en el 2,6%. Según los analistas, esta alza es consecuencia de los precios del petróleo y de la carne.
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