Milosevic decidió no desalojar la TV antes del ataque, según Del Ponte

Carla del Ponte solicitó ayer pruebas a la OTAN para inculpar a Slobodan Milosevic del bombardeo aéreo norteamericano contra la sede de la televisión serbia en 1999, del que fue advertido con anterioridad por los aliados. La fiscal del Tribunal Penal Internacional para los Crímenes de Guerra en la ex Yugoslavia (ICTY, en sus siglas en inglés) se entrevistó a tal efecto con el secretario general de la Alianza Atlántica, George Robertson.

'Es un asunto muy interesante que he tratado con lord Robertson, pero aún no dispongo de documentos', declaró ayer por la tarde en Bruselas al término de una breve visita a la capital comunitaria, donde se reunió con el alto representante de la UE, Javier Solana, y el presidente de la Comisión, Romano Prodi.

El ataque ocurrió el 23 de abril de 1999 en Belgrado y causó más de una docena de víctimas. Las autoridades locales fueron informadas previamente por el Comando Militar Aliado, pero no hicieron nada para desalojar el edificio. El director de la televisión de la época ha sido detenido y va a ser juzgado en su país.

La Haya podría utilizar la supuesta negligencia del ex presidente Milosevic como prueba legal para su procesamiento ante el ICTY. El actual primer ministro serbio, Zoran Djindjic, sostiene que es más fácil inculpar a Milosevic por malversación de fondos y otros delitos económicos que por crímenes de guerra.

'La cooperación con el tribunal de La Haya no pondrá en peligro el proceso de transición, sino que reforzará la normalización democrática' de la República Federal de Yugoslavia, dijo ayer tarde en los pasillos de la Comisión la magistrada suiza. Del Ponte entregó una lista de presuntos culpables al presidente yugoslavo, Vojislav Kostunica, a principios de este mes, durante una visita que las autoridades de Belgrado calificaron de muy tensa.

Firmeza de los Quince

Solana informó ayer a la fiscal internacional de la visita que realizó a Belgrado hace casi dos semanas acompañando a la troika comunitaria. La UE comunicó a Kostunica y Djindjic que los Quince se mantienen firmes sobre la necesidad de que Yugoslavia colabore hasta el final con La Haya, pero, a diferencia de EEUU, no pone por el momento plazo. 'A mí tampoco me gusta hablar de plazos', comentó Del Ponte en Bruselas, pero Belgrado 'tiene que dar pronto claras señales de colaboración'.

[El ministro del Interior yugoslavo, Zoran Zivkovic, acusó ayer a la OTAN de ser 'demasiado blanda' ante la violencia étnica que se está dando en Kosovo contra los serbios, informa Reuters. Zivkovic aseguró que tanto la fuerza internacional para Kosovo (Kfor) como la administración de Naciones Unidas en la provincia (Unmik) deberían tomar medidas más duras contra los albaneses armados, aunque están evitando la confrontación. 'Si alguien tiene un mandato para proteger a los civiles, debe ser enemigo de los terroristas', señaló.]