El informe de calidad de la universidad andaluza incide en su masificación y escasez de recursos

Este año se suman las universidades de Málaga y Almería, que no se integraron al plan de evaluación anterior, según indicó ayer el coordinador del comité técnico del informe, Juan Ruiz Carrascosa. 'Prácticamente todas las titulaciones evaluadas indican la inadecuación de las instalaciones de las que disponen. En la mayoría de los casos estas deficiencias son debidas a que las instalaciones son obsoletas y fueron creadas para un número mucho menor de alumnos de lo que en la actualidad hacen uso de las mismas'.

Así de contundente se muestra el informe del Plan de Evaluación de la Calidad de las Universidades Andaluzas. También destaca la escasez de medios audiovisuales e informáticos. A pesar de las progresivas mejoras que se observan, añade, los laboratorios siguen siendo insuficientes, las aulas de informática escasas, las bibliotecas carecen de capacidad para atender a la demanda y las instalaciones complementarias, como copisterías o comedores, son valoradas negativamente.

Las quejas de los estudiantes, profesores y personal de administración continúan a lo largo del informe, sobretodo cuando inciden en el apartado de investigación: insuficiencia de recursos a todos los niveles (personal, material y económico). El informe recoge la queja de que el número de profesores contratados es superior al de profesores funcionarios ya consolidados 'y que las ampliaciones de plantilla se hacen por la vía de contratar a personal docente antes que por facilitar la promoción del personal investigador'.

Entre los puntos fuertes del sistema universitario andaluz, el informe del Plan destaca la existencia de un profesorado preocupado por motivar a los alumnos, 'por hacer las clases participativas' y por introducir 'iniciativas de calidad en su actividad docente'. Juan Ruiz destacó que el informe sobre calidad no pretende hacer un listado con las mejores o peores universidades andaluzas. Lo que se busca, indicó, es generalizar la cultura de la evaluación, animar a las universidades y las titulaciones que las componen a someterse a controles que determinen sus fortalezas, sus déficits y sus potencialidades.

Comparativa

'Este informe es sólo el primero, lo interesante es ver la comparación con el segundo, que se conocerá este mismo año, analizar el tercero que se haga en el que ya se verán las tendencias de la universidad andaluza, y continuar con más en el futuro para ver las líneas con mayor claridad', resaltó Ruiz Carrascosa.

El temor del grupo que elabora los informes de calidad es que las recomendaciones de mejora que introducen en el trabajo no sean seguidas por las universidades. 'Si no se llevan a cabo, si no se inician mejoras, la evaluación no sirve para nada. Lo que estamos haciendo sería un esfuerzo en vano'.

Juan Ruiz no es excesivamente optimista. 'Hay titulaciones que llevan evaluadas un año y no han hecho nada. Eso es peligrosísimo'. No obstante, reconoce que los expertos en evaluación advierten de que han de pasar 'algunos años' antes de que reaccione el sistema universitario ante las deficiencias que se le plantean. El informe propone que se reflexione sobre la estructura actual de la universidad y su adecuación a las titulaciones; que se revisen los planes de estudio; que se cree una cultura de atención individualizada al estudiante o que se modifiquen los procesos de selección del profesorado. También indica que se debe dotar a los centros de infraestructuras más adecuadas, que se debe favorecer que la investigación revierta en la docencia o que se cree la figura del voluntario, 'compensando su contribución con descuentos en las matrículas o con la opción a participar en actividades interuniversitarias con el patrocinio de la Consejería de Educación'.

Ruiz Carrascosa considera que atender a las propuestas de mejora del informe no implica, en todos los casos, incrementar los presupuestos de las universidades. 'No siempre las recomendaciones van ligadas a más recursos, sino a un mejor aprovechamiento de los que existen'.