El PSOE denuncia que unos 200 ancianos están en lista de espera en Málaga para acceder a la ayuda a domicilio
Envejecer en casa. Eso es lo que quiere el 80% de las 90.000 personas mayores de 65 años que viven en Málaga. Pero para aquellos ancianos que ya no pueden valerse por sí mismos y carecen de recursos para pagar a alguien que realice las tareas domésticas, no es fácil acceder a la ayuda a domicilio. Al menos así se desprende de los datos aportados ayer por el Grupo Socialista en el ayuntamiento, que denunció la existencia de una lista de espera de alrededor de 200 personas.
Para la concejal del PSOE María del Carmen Sánchez, el equipo de gobierno municipal debe 'replantearse' el servicio ya que a esta cifra hay que añadir otros 1.125 casos de mayores que han presentado sus solicitudes, pero que debido al 'colapso' existente, siguen pendientes de tramitación.
La ayuda a domicilio es un sistema que permite a las personas mayores continuar en su entorno y evitar así su ingreso en una residencia. El servicio fue puesto en marcha por el Partido Popular en 1996. La edil socialista criticó que desde entonces no se haya incrementado la plantilla, a pesar de que cada vez el número de usuarios es mayor. Según sus datos, cuando se creó, atendía a 553 usuarios con 79 trabajadores, mientras que el año pasado los beneficiarios del programa eran 765 y los empleados los mismos. 'Antes se atendía dos horas diarias a cada persona y ahora dos horas a la semana', aseguró.
Sánchez resaltó que el colapso del servicio provoca que muchos mayores tengan que esperar a que se produzca una baja -por muerte, ingreso en una residencia o porque solucionan su problema- para acceder a la prestación. Incluso detalló que algunas de las personas que están en la lista de espera llevan aguardando casi dos años.
A fin de paliar la situación de forma inmediata, la edil socialista reclamó dos medidas urgentes: incremento del presupuesto destinado al programa y la subrogación de la plantilla por una empresa municipal, tal como acordó el pleno hace casi dos años. Sánchez cuestionó que el Ayuntamiento haya recortado la partida destinada a la ayuda a domicilio, que pasó de 265 en 1999 a 217 en 2000. El presupuesto municipal destina unos 3.000 millones de pesetas a Servicios Sociales, de los cuales alrededor de 400 se dedican a los mayores, una cantidad que para la concejal del Grupo Socialista es 'claramente insuficiente'.
La edil también arremetió contra la precaria situación de los trabajadores del servicio, que siguen perteneciendo a una empresa privada, pese a que en 1998 se aprobó su incorporación a una sociedad municipal. Aquel acuerdo fue impuesto por la oposición al PP, que entonces no tenía mayoría absoluta. La decisión fue adoptada en el último pleno de la anterior corporación y tras varios meses de protestas de los empleados. Hasta ahora, el acuerdo no se ha cumplido.
