'Sharon es muy peligroso y tiene obsesión por la fuerza'

Los laboristas han cerrado filas en torno a la candidatura de Ehud Barak en las elecciones a primer ministro que se celebrarán en Israel el próximo 6 de febrero. Ésta es la primera y gran conclusión que se desprende de las declaraciones de la diputada laborista Yael Dayan, de 61 años, madre de cinco hijos, escritora, periodista y feminista, hija de un héroe nacional, uno de los padres de la patria, el general Moshe Dayan, el líder de la Guerra de los Seis Días y a la vez el hombre que negoció la paz con los egipcios.

Yael Dayan lo ha abandonado todo, incluido su carrera de escritora y periodista, y se dispone a participar en una batalla electoral, una de las más duras y difíciles de la izquierda israelí, con la que se intenta cerrar el paso a la derecha nacionalista Likud, encabezada por Ariel Sharon, y dar otra oportunidad a la negociación con los palestinos porque, en su opinión, 'no hay otra paz que la que Barak plantea'.

Pregunta. ¿Se siente defraudada por el hecho de que Ehud Barak no se hubiera retirado ayer de las elecciones cediendo el puesto a Simon Peres?Respuesta. Barak es nuestro único candidato. Él fue elegido por el partido. No creo que Simon Peres estuviera detrás de la campaña para que Barak renunciara a su candidatura.

P. ¿Pero aún cree posible que Barak pueda ganar, cuando todos los sondeos le son adversos?

R. Hay posibilidades. Tenemos que esperar hasta el último momento. La verdad es que la mayoría de los israelíes quieren la paz. Pero no lo sabremos hasta el martes. Si no hubiera sido por la Intifada de los últimos cuatro meses y los palestinos hubieran sido más cooperativos y menos violentos, habría sido otra cosa.

P. ¿La victoria de Sharon será un desastre para Israel, tal y como dice la propaganda de su partido?

R. Sharon es muy peligroso; tiene una obsesión por la fuerza y es agresivo. Logra que el miedo se imponga y domine. No me parece lógico apoyar a Sharon. Creo que la gente que lo vota trata de vengarse contra los árabes y los palestinos, pero también opino que es una reacción de miedo; algunos israelíes están actuando en estas elecciones como víctimas, movidos por la venganza.

P. ¿Y que pasará si Sharon gana?

R. Sharon va a intentar formar un gobierno de unidad nacional. No creo que podamos ir con Sharon, si él se alía con la extrema derecha y mientras defienda una agenda que va contra la paz; él habla de un duro futuro para los palestinos y no sé si esto significa que va a volver a conquistar Nablús o disparar y matar palestinos o imponer un cerco económico. Esto no es un plan de paz.

P. ¿No cree que las negociaciones con los palestinos hubieran podido llevarse de otra manera?

R. No hay otra paz posible que la que Barak plantea. La historia ha demostrado que la paz es posible. En la Edad Media hubo una guerra de los Cien Años, que es el tiempo que ha durado este conflicto; después hubo una paz. Estoy segura que no hay otra alternativa a lo que hemos hecho hasta ahora. Hemos desnudado mitos de miles de años y hemos demostrado a la derecha las características de un acuerdo con los palestinos.

P. ¿Cuál es el futuro de las relaciones entre israelíes y palestinos?

R. Hay que poner fin a la ocupación. Los palestinos tienen que tener su Estado. Pero también tienen que aceptar soluciones de compromiso con respecto a los lugares santos de Jerusalén. Opino asimismo que hay que evacuar la mayoría de los asentamientos de Cisjordania y Gaza, aunque, como Barak, opino que el 80% de los colonos permanecerán en sus asentamientos.

P. ¿No tiene miedo del voto en blanco, de los escépticos y descontentos?

R. El voto en blanco será bajo. Dependerá del estado de ánimo de los votantes el día de las elecciones.

P. ¿La batalla electoral parece haber provocado estragos en el interior del partido Laborista y se habla incluso de una guerra por la sucesión de Barak?

R. No estoy envuelta en estas disputas. No estoy metida en estos temas. Espero que se mantenga la unidad del partido. En su momento habrá elecciones internas y cualquiera podrá presentarse. Ahora estoy dedicada de lleno a la campaña electoral. Siento que la gente está volviendo hacia Barak. Mi tarea es convencer a la mujer y al sector árabe para que le den su apoyo.