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Roberto Carlos, a la cabeza de todos

El lateral brasileño ha sido el mejor futbolista del campeonato en la primera vuelta

Santiago Segurola

Diez jugadores han tenido un papel especialmente relevante en este primer tramo del campeonato.

- Roberto Carlos (Real Madrid). El mejor jugador del campeonato, con la dificultad añadida de su posición como lateral izquierdo. Desde allí opera como defensa, extremo y ventilador del equipo. Su impacto en el juego del Madrid resulta espectacular. A todo eso, añade goles, pases de gol y un optimismo contagioso. Su ausencia de la selección brasileña ha tenido un efecto decisivo en el gran momento físico que atraviesa.

- Figo (Real Madrid). Cuando el Madrid fichó a Figo, no sólo le quitó un gran jugador al Barça: le despojó de un símbolo. En el complejo equilibrio de poderes del fútbol español, el Madrid ha tomado la delantera a su gran rival después de una década de frustraciones. En el campo, Figo ha estado a la altura de su prestigio: un ganador para un equipo que necesitaba este tipo de futbolista. En los últimos partidos se le ha subido el pavo con tanto premio. Pecadillos de vanidad.

- Kluivert (Barcelona). El delantero centro perfecto si tuviera un poco más de gol. Pero Kluivert progresa: ha marcado diez tantos en la primera vuelta. Como jugador es intachable. Grandes recursos en los controles, en la conducción, en el pase, en el juego aéreo y, muy especialmente, cuando se encuentra de espaldas a la portería. De frente, pierde nota. En cualquier caso, es un jugador joven y esencial en el Barça.

- Simao (Barcelona). Ningún jugador se ha encontrado en una situación más delicada que Simao: ocupar el puesto de Figo. Y hacerlo en condiciones precarias. El año pasado defraudó al personal. No regateaba a nadie, se quitaba responsabilidades de encima y parecía angustiado. Intachable en esta temporada: veloz, intrépido y peleador. Ha convencido a los escépticos y ha aliviado algo la herida que provocó la marcha de Figo.

- Carew (Valencia). Siempre estará contestado por los puristas. A primera vista es una grúa, el típico delantero a la inglesa que pone nerviosos a los aficionados españoles. Sin embargo, se mueve con agilidad, rapidez y mucha potencia. No es ningún zoquete con el balón, aunque todavía no se suelta a jugar. Su importancia está directamente relacionada con un problema: por sus características condiciona demasiado el juego del Valencia, cada vez más frontal y dependiente del gigante noruego.

- Donato (Deportivo). Cualquier futbolista de 38 años con un papel protagonista en su equipo, merece un reconocimiento especial. El mérito de Donato se acrecienta por su espléndida contribución al actual campeón de Liga. Ahora como defensa, demuestra su oficio cada domingo. Juega con tranquilidad e inteligencia, dos cualidades poco comunes entre los defensas españoles.

- Javi Moreno (Alavés). El triunfo de un jugador que ha vivido hasta ahora en la periferia del fútbol. Salió de las categorías inferiores del Barça para transitar por el Yeclano, Numancia y Alavés. Máximo goleador de la Liga -15 tantos-, ha recibido ofertas de la Liga inglesa. Potente, decidido, buen cabeceador y rematador con la zurda. Un ariete que cumple con su oficio.

- Etoo'o (Mallorca) Un jugador que resume la excelente temporada del Mallorca. Sin demasiado ruido se ha convertido en un futbolista prometedor, hasta el punto de que el Madrid parece dispuesto a recuperarlo. Temible por su velocidad en los espacios cortos. Cada vez más preciso ante la portería.

- Djalminha (Deportivo). Una de las cosas que hablan bien de la Liga española es que ofrezca refugio a jugadores como Djalminha. En Italia ni se les ocurre ficharle. Estarían tan preocupados de sus defectos que se olvidarían de sus extraordinarias virtudes. Autor de acciones inolvidables, pocos futbolistas provocan tanto entusiasmo en los aficionados. Aunque su inclinación por lo imposible es bien conocida, no se trata de un jugador banal. Gran capacidad de pase, de regate y de tiro. O sea, una amenaza latente para los defensas.

- Cagna (Villarreal). En una época escasa de centrocampistas puros, Cagna hace sin ruido todas las misiones que se esperan en el medio campo. Inteligente, con un buen despliegue, capacidad para quitar, listo para asociarse. Apenas nadie repara en él, pero su partido frente al Barça en el Camp Nou fue maravilloso.

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