La Diputación guipuzcoana rematará en seis meses la expropiación del área más degradada de Pasaia
La Diputación de Guipúzcoa rematará en los meses de verano la expropiación de los terrenos de la ribera de Molinao, el área más degradada de Pasaia, actualmente ocupada por pabellones industriales en estado ruinoso. El diputado general, Román Sudupe, explicó ayer que las gestiones para liberar esta parcela ya se han iniciado y están a punto de culminar con los propietarios de la empresa Beissier, la firma más importante de las que poseen terrenos en dicha zona.
La expropiación de los terrenos de Molinao, con un coste de 990 millones de pesetas (5,9 millones de euros) permitirá al Ayuntamiento de Pasaia iniciar las obras para crear nuevos espacios libres y ajardinados de calidad en la margen derecha de la ría.
El proyecto se incluye dentro del plan de regeneración urbanística de la bahía de Pasaia, en el que están involucrados los gobiernos central y vasco, la Diputación y los ayuntamientos implicados.
El Ejecutivo foral firmó ayer un convenio con el Departamento de Ordenación del Territorio, Vivienda y Medio Ambiente por el que el Gobierno vasco aportará 330 millones de pesetas para financiar la expropiación de Molinao. El consejero Patxi Ormazabal manifestó que el convenio hará posible la transformación urbanística de Pasaia que enmendarán 'errores del pasado'. Sudupe y Ormazabal señalaron que el convenio recoge la posibilidad de que el Gobierno central se adhiera al mismo con una aportación de 330 millones, idéntica a la de las otras administraciones.
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