La oposición advierte a Atutxa contra el uso de su voto de calidad en las decisiones del ParlamentoQuince proposiciones
Fuentes cercanas al presidente de la Cámara vasca rechazan este cuestionamiento de sus actuaciones, que siempre han seguido, aseguran, 'la dirección marcada por los informes jurídicos emitidos por los letrados del Parlamento y los precedentes existentes en asuntos de naturaleza similar'. El recurso al voto de calidad del presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, que se produce en el enrarecido clima preelectoral vasco, en el que empieza a contar también la previsión de que será el cabeza de lista por el PNV en Vizcaya, está levantando en la oposición una creciente ola de malestar amenaza con poner fin al respeto mantenido hasta ahora hacia su figura institucional. Así, en el seno del grupo parlamentario socialista se advierte a Atutxa de que no admitirán más un uso que consideran 'abusivo' de ese recurso, regulado por la ley de procedimiento administrativo, con el que consideran que se están entorpeciendo o retrasando las propuestas de la oposición y favoreciendo a los grupos del Gobierno o al propio Ejecutivo.
El portavoz socialista, Rodolfo Ares, señaló a este periódico que su grupo desatará una ofensiva de denuncia pública en toda regla contra Atutxa si el presidente vuelve a hacer uso del voto de calidad en una ocasión más. Ares hace extensiva su advertencia a la presunta intención de los grupos del Gobierno de ralentizar la tramitación de las proposiciones de ley de la oposición bloqueando la constitución de comisiones, cosa que ya hicieron con la de Víctimas del Terrorismo, por el procedimiento de no acudir para que no hubiera quórum, o dilatando sus trabajos.
'Tenemos una gran preocupación por la utilización permanente del voto de calidad para ayudar a la defensa de las tesis e intereses de los grupos del Gobierno' afirma, al tiempo que pide a Atutxa que 'termine con esa situación'. 'Sólo así podremos seguir viéndole como la persona que garantiza y vela por el buen funcionamiento de la Cámara'. El portavoz socialista recuerda también que el propio presidente del Parlamento se comprometió a no hacer uso de su voto de calidad más que de modo excepcional. Así lo dijo en la primera ocasión en que se produjo un empate, con motivo de la tramitación de las mociones de censura a finales de septiembre. La última vez fue para negar la calificación de urgente a la iniciativa del PP y el PSE que persigue restablecer en el 5% el porcentaje de votos mínimo para obtener escaño. Ares considera que la evidencia de que las elecciones se pueden producir en cualquier momento habla por sí sola de la urgencia de esta iniciativa.
La oposición ha aprovechado la minoría del Gobierno para presentar en el Cámara una batería de proposiciones de ley, menos en la confianza real de sacarlas adelante que en la de presionar con ellas para la rápida disolución del Parlamento. En total son 15 las registradas. Los asuntos que más riesgo potencial entrañan para el Ejecutivo de Ibarretxe son los siguientes:
- la reforma de la ley electoral (planteada por PP y PSE), que restablecería en el 5% el porcentaje mínimo de votos para obtener escaño y dificultaría el acceso de IU a la Cámara.
-la proposición popular que persigue la elección del director de EITB por mayoría simple de la Cámara, lo que dejaría su nombramiento en manos de la oposición.
-el establecimiento, también a propuesta del PP, del perfil lingüístico 0, con la consiguiente eliminación de la actual exigencia generalizada para accdeder a un empleo público de tener un determinado nivel de conocimiento del euskera.
-otra iniciativa, también popular, que pretende declarar el 25 de octubre, aniversario del referéndum del Estatuto de Gernika, como día de la comunidad, una celebración siempre rechazada por los nacionalistas.
- enmendar la ley del Deporte sobre las selecciones vascas.
Otros asuntos pendientes plantean la modificación de la ley de Policía en aspectos relativos a la representación sindical (proposición del PSE), la igualdad jurídica de las parejas de hecho (PSE e IU) o la extensión del salario social a todos los mayores de 18 años (PSE).
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