El Museo Sorolla ofrece dos nuevos lienzos de la primera época del pintor

'El problema que tenemos en este museo es que es muy rico en fondos sólo a partir de 1900', explicó ayer Florencio de Santana, director del Museo Sorolla. 'Joaquín Sorolla fue un pintor que desde el principio empezó a vender bien su obra, por lo que la mayor parte de los cuadros de la primera época están en manos de colecciones privadas. La colección familiar reunió, sobre todo, las obras a partir de 1900, que además son las más conocidas', añadió, 'pero para completar los fondos del museo indicamos al ministerio que adquiera obras de las primeras épocas, como es el caso'.

De esta manera se han incorporado estos dos últimos lienzos a la exposición permanente de esta pinacoteca. El Ministerio de Cultura los adquirió en sendas subastas celebradas en España. 'Ambos pertenecen a sus primeras épocas', recordó.

Moro con naranjas es un lienzo de pequeño formato con pinceladas detalladas, muy lejos del estilo de grandes toques con pinceles muy anchos que caracterizarían el estilo de Sorolla en sus etapas de madurez creativa. Es un cuadro de género realizado por el artista durante su estancia en Roma como pensionado, y se enmarca en la línea orientalista que comenzó con Fortuny. 'Este tipo de lienzos eran muy solicitados por los particulares para decorar sus viviendas', informa el Museo Sorolla en una nota, 'por lo que resultaba de venta fácil y permitía incrementar los recursos de los pensionados'.

En cuanto a Pillo de playa, ya de mayor tamaño (casi dos metros cuadrados de superficie), 'se trata de un lienzo que adelanta lo que después sería la obra más conocida de Sorolla', como recalcó el director. El pintor cultiva ya la temática de la playa y las gentes de mar, dentro de lo que se define como costumbrismo marinero, pero, a diferencia de obras posteriores, 'está realizada en el estudio y no al natural'.

Estudio en Tirso de Molina

'La pintó en su estudio de Madrid, donde ahora está la plaza de Tirso de Molina, recogiendo ficticiamente las luces del mar mediterráneo, donde situará muchísimas composiciones futuras', informa la nota del museo. 'Estos lienzos fueron ejecutados por Sorolla cuando aún no había cumplido los 30 años y, debido al enorme interés que poseen para conocer su evolución como artista, pasan a incorporarse a la colección permanente del museo', continúa la nota. Desde ayer se pueden contemplar en la sala VII, 'dedicada a mostrar una selección de las mejores obras que atesora este centro'.

El Museo Sorolla es, al tiempo que un lugar donde se exponen algunas de las más representativas obras del pintor, un recuerdo de su vida. Está en la misma casa que Sorolla mandó construir en 1912, y recoge muebles que la decoraron y colecciones que atesoró el artista mientras residió en ella. A su muerte, en 1929, su viuda, Clotilde García del Castillo, la donó al Estado español, y en esta herencia incluyó no sólo los lienzos, sino también los muebles y enseres que decoraban la casa. El museo se abrió al público en 1932. Las obras de las plantas superiores se han ceñido al arreglo del techado, donde se habían apreciado pequeñas humedades, y la pintura, en tono amarillo, de las paredes.

Museo Sorolla. General Martínez Campos, 37. Metro Rubén Darío. De martes a domingo. De 10.00 a 15.00. 400 pesetas. Estudiantes, 200.