El PP reprocha a Pujol que reajuste su Gobierno 'por intereses personales'

La reestructuración del Gobierno catalán anunciada por Jordi Pujol es un 'gran error' porque se basa en 'intereses personales' y no en los de Cataluña. Así se manifestó ayer Alberto Fernández Díaz, presidente del Partido Popular en Cataluña, el grupo en el que se apoya Pujol para sacar adelante su acción legislativa en el Parlament. El PP se vanagloria de ser el apoyo parlamentario de CiU desde octubre de 1999. 'En Cataluña existe crisis de CiU, pero no de gobierno', dijo Alberto Fernández Díaz.

Fernández Díaz señaló que 'CiU puede esperar responsabilidad por parte del PP pero no actos de fe'. Añadió que su partido ha hecho más por la estabilidad de Cataluña que la coalición nacionalista, que en su opinión, está 'más interesada en la sucesión de Pujol'.

Desde que CiU quedó en precaria situación para gobernar en solitario tras las últimas elecciones al Parlament se apoya en el PP para seguir gobernando. Las relaciones entre CiU y PP suelen atravesar por situaciones de tensión, pero al final el partido que dirige Fernández Díaz en Cataluña siempre acaba apoyando a los nacionalistas. La intención última del PP es evitar que el socialista Pasquall Maragall, que ya ganó las pasadas elecciones autonómicas en número de votos, pueda acceder al Gobierno catalán.

La posición decisiva del PP quedó patente hace un mes cuando se aprobaron los presupuestos de la Generalitat para este año. El PP volvió a sacar adelante su propuesta de hacer inversiones en un centenar de poblaciones en las que quiere mostrar su influencia. Y obligó a CiU a votar a favor de una enmienda en la que se insta al Gobierno catalán a impulsar una ley de estabilidad presupuestaria siguiendo la pauta de la ley estatal que el Gobierno central acaba de enviar al Congreso.

El presidente del PP catalán se vanaglorió ayer de mantener la estabilidad del Gobierno catalán con el apoyo de su grupo. Pero mostró su inquietud ante la progresión de los sectores soberanistas en Convergència. 'Esperamos que el avance de los radicales de CDC no se traslade al Ejecutivo catalán', dijo.