_
_
_
_
AGITACIÓN EN EL PANORAMA ECONÓMICO

La economía alemana perderá dinamismo el próximo ejercicio

Pilar Bonet

La economía alemana perderá dinamismo este año y acusará los efectos del incremento de los precios del crudo, la política monetaria restrictiva del Banco Central Europeo (BCE) y el descenso de los ritmos de crecimiento de la economía estadounidense. Así lo indican los pronósticos de coyuntura para los años 2001 y 2002 que difundió ayer en Berlín el Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW), que prevé un crecimiento de un 2,5% en el 2001 y un 2,7% en el 2002.

El pronóstico para el 2001 supone una corrección de una décima a la baja con relación al anterior, que fue asumido por los seis principales institutos alemanes en su informe de otoño. Tanto el Instituto IFO de Múnich como el Instituto de Economía Mundial de Kiel han revisado aquella cifra para situarla ahora en el 2,5% y el 2,4%, respectivamente. Sin embargo, el Gobierno federal alemán mantiene su previsión del 3% del crecimiento y la misma cifra era defendida ayer por el economista jefe del Deutsche Bank, Norbert Walter.

El crecimiento de la economía alemana se debe sobre todo en la exportación, que se ha beneficiado del euro débil y del moderado aumento de los salarios. A tenor de las previsiones, Alemania no podrá mantener el ritmo exportador de estos últimos años, según el DIW, ya que los efectos de la subida de los precios del petróleo frenarán las exportaciones. El crecimiento del 11,3% que la exportación registró en 2000 se reducirá a un 7,4% en 2001, para recuperarse en la segunda mitad de 2002.

Según el informe del DIW, la continuación de la tendencia positiva en la economía alemana dependerá de la capacidad de la demanda interior para compensar el descenso de la demanda exterior. En ese sentido, la reforma fiscal que ha emprendido el Gobierno alemán es un factor positivo para impulsar el consumo privado, que ha acusado también los efectos del incremento de los precios del petróleo.

En el sector laboral, el DIW constata una evolución positiva del mercado y un descenso del porcentaje de paro, que pasará del 9,2% al 8,5% en el 2001, para situarse en el 8% en el 2000.

Precisamente, ayer se conoció el desempleo en los países del euro: en noviembre se mantuvo en el 8,8% frente al 9,6% de un año antes, egún los últimos datos estadísticos publicados ayer por Eurostat. El índice de paro en la Unión Europea bajó al 8,1% ese mes, lo que representa un total de 14 millones de desempleados, informa Sandro Pozzi.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_