El Congreso de Tabasco desafía al Tribunal Electoral mexicano

En abierto desafío, el Congreso de Tabasco, controlado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), modificó ayer la Constitución local para evitar que la histórica anulación de las elecciones del 15 de octubre a gobernador de ese Estado, decretada por el Tribunal Electoral de México, arrebate al priísta Manuel Andrade su protestada victoria en aquellos comicios. El Tribunal pidió al Congreso que convoque nuevas elecciones, pero el Congreso respondió con una enmienda constitucional que amplía los plazos para hacerlo y, finalmente, faculta al legislativo para instalarse como colegio y designar al nuevo gobernador en el plazo de dos años.La anulación de las elecciones, por fraudulentas, agravó, por otra parte, las pugnas registradas en el seno del PRI después de su derrota en las generales del pasado 2 de julio, fecha en las que perdió la presidencia de México tras retenerla durante 71 años. La sentencia judicial invalidó el triunfo de Andrade, y afecta directamente a su mentor, el gobernador saliente, Roberto Madrazo, que apostó a un triunfo de su protegido para reforzar sus propias aspiraciones a la jefatura de un PRI desorientado y dividido en facciones. Un sector apoya a Madrazo y otro exige su salida del partido.

El Partido de la Revolución Democrática (PRD), de centro-izquierda, cuyo candidato, Raúl Ojeda, se proclamó ganador el 15 de octubre pese a la decisión del Instituto Electoral de Tabasco de conceder la victoria a Andrade, anunció movilizaciones para evitar que la decisión del Congreso de Tabasco, calificada de "golpe de Estado", impida nuevas elecciones. La crisis política afecta a los tres principales partidos, ya que el conservador Partido de Acción Nacional (PAN), al que pertenece Fox, apoya las reclamaciones del PRD.