Nadal considera "irresponsable" que Pujol rechace una ley electoral propia

El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Parlament, Joaquim Nadal, consideró ayer una "irresponsabilidad" que el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, se niegue a abordar en esta legislatura la elaboración de una ley electoral propia para Cataluña. El PSC, por boca de su presidente, Pasqual Maragall, ha sembrado esta semana dudas sobre la legalidad del método utilizado hasta ahora en Cataluña para convocar las elecciones autonómicas y ha avisado de que "si se quiere una convocatoria ajustada a derecho" debe aprobarse una ley electoral propia.El Gobierno catalán desestimó sin contemplaciones la petición de Maragall y la achacó a los "intereses personales" de Maragall, cuya opción superó en las últimas autonómicas a CiU en número de votos, pero no obtuvo menos escaños que la coalición nacionalista. "Algún día [Pujol] pagará esta huida hacia delante", advirtió Nadal.

Maragall ha encargado a uno de sus principales colaboradores en el Parlament, Josep Maria Vallès, catedrático de Ciencia Política de la Universidad Autónoma (UAB), que examine a fondo las bases legales del método utilizado hasta ahora para convocar las elecciones autonómicas. Las dudas expresadas por Maragall se basan en que todos los comicios autonómicos en Cataluña han tomado como base legal la disposición transitoria cuarta del Estatuto, aprobado en 1979, cuya aplicación mecánica a la actualidad provoca algunas disfunciones.

Dicha disposición establece varios criterios hoy aparentemente incongruentes: de un lado, fija en 135 el número de escaños; del otro, asigna a cada provincia un número de parlamentarios en función de su población, que ha ido variando con el paso de los años. Si se aplicara el criterio de la disposición transitoria, las demarcaciones de Girona y Tarragona tendrían hoy dos diputados más cada una, lo que fijaría en 139 el número de diputados del Parlament, en contra de lo establecido por la propia disposición.

Déficit del Estatut

Cataluña es la única comunidad autónoma que no dispone de una ley electoral propia, a pesar de que éste es un mandato del Estatut. Nadal negó ayer que la propuesta de aprobar una ley catalana responda a objetivos personales de Maragall y afirmó que un cambio de sistema no comportaría necesariamente una variación de los resultados. "La oferta [de aprobar la ley] pretende hacer cumplir el Estatut y superar el déficit en el que CiU nos mantiene desde hace más de 20 años", afirmó Nadal, quien consideró una necesidad "superar el estado de provisionalidad".Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) también pretenden que en esta legislatura se aborde el debate sobre la ley electoral de Cataluña. Todos los grupos de izquierda se proponen introducir este debate en la comisión parlamentaria que estudiará la situación del autogobierno, cuyos trabajos concluirán en junio.