_
_
_
_
_

Los ecologistas se movilizan contra la ampliación de Baqueira

Maniobra del Gobierno

Más información
FOTO SIN TITULO
"Puig busca favorecer a una empresa privada"

La decisión del Departamento de Medio Ambiente de autorizar la ampliación de la estación de esquí aranesa de Baqueira-Beret hacia el valle de Àrreu, en el Pallars Sobirà, ha reavivado la polémica entre los promotores del proyecto y colectivos ecologistas que lo rechazan por creer que destruirá uno de los parajes vírgenes que quedan en el Pirineo leridano. La zona está incluida en el Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN) aprobado por el Gobierno catalán en 1992 y uno de los Lugares de Interés Comunitario desde 1996.Baqueira-Beret, por sus dimensiones, es uno de los mayores complejos invernales de España. Tiene un dominio esquiable de 825 hectáreas. Por sus pistas pasaron la pasada temporada más de 800.000 esquiadores. Desde 1964, cuando se inauguró el primer telesilla, sus instalaciones no han parado de crecer y modernizarse hasta transformar profundamente el valle de Aran, un hecho impensable sin la tolerancia de las administraciones.

El consejero Felip Puig avanzó la semana pasada que su departamento ha decidido autorizar la ampliación, aunque recortando ligeramente las pretensiones iniciales de sus promotores, con los que tiene previsto reunirse el próximo 15 de enero. Puig explicó que, para no entrar en contradicción con la directiva de Habitats comunitaria, se revisará la propuesta catalana sobre espacios ya incluidos en la Red Natura 2000, entre los que se encuentra el valle de Àrreu. Baqueira-Beret calla hasta conocer oficialmente los recortes que propone la Administración.Puig ha anunciado la creación del parque natural del Alto Pirineo para "hacer compatibles la práctica del esquí y la preservación de la biodiversidad". Los ecologistas denuncian que se trata de una maniobra del Gobierno catalán para excluir 1.100 hectáreas del valle de Àrreu, justo la zona en la que está proyectada la ampliación de Baqueira-Beret, y así poder ejecutar las obras sin infringir la normativa ambiente.

Los ecologistas califican la actitud de Medio Ambiente de "fraude moral al país"

La Plataforma para el Desarrollo Sostenible del Macizo de Beret, formada por un centenar de entidades ecologistas y excursionistas de toda España, considera "inadmisible" la decisión del consejero Puig de crear un parque natural a cambio de ceder patrimonio natural a una empresa privada para que pueda destruirlo. "Es un fraude moral al país y, como se demostrará, una ilegalidad, puesto que los parques naturales y los PEIN [Plan de Espacios de Interés Natural de la Generalitat] no son compatibles con las estaciones de esquí", señala la plataforma ecologista.La pretensión de la estación de expandirse ahora al otro lado de la Bonaigua ha despertado la lógica expectación entre los vecinos del municipio de Alt Àneu (400 habitantes), que ven en esta iniciativa empresarial una gran oportunidad para mejorar sus niveles de renta. Desde el punto de vista económico y social, la zona está inmersa desde hace 20 años en un proceso de cambios estructurales que se caracterizan por una crisis de las actividades agrícolas y ganaderas tradicionales.

La empresa que explota la estación de Baqueira-Beret presentó hace casi un año uno de sus proyectos más ansiados: prolongar sus dominios hacia el Pallars Sobirà, donde se crearía una nueva superficie esquiable de 154 hectáreas, que quedaría conectada a las actuales instalaciones mediante un entramado de 12 telesillas y remontadores con capacidad para trasladar a 27.000 esquiadores por hora desde el pequeño pueblo de Sorpe, en la cabecera de la comarca.

Lo que no esperaban los promotores de la ampliación es la oposición de las principales organizaciones ecologistas de España. Es un hecho admitido por todas las partes que el 90% de la futura área esquiable -a la que hoy no hay acceso rodado- está incluido en el (PEIN, incompatible con la construcción de 30 kilómetros de pistas de esquí, 15 de canalizaciones de agua, 16 de carreteras y pistas forestales, 17 telesillas y remontadores, 4 aparcamientos y 4 áreas de hoteles y cafeterías.

El PEIN indica que dicho espacio "acoge una de las mejores muestras de la fauna pirenaica" y que el buen estado de conservación de las formaciones forestales "favorece la presencia de los grandes mamíferos, mientras que la calidad de las aguas y el buen estado de las riberas acogen una relevante fauna". Diferentes estudios de científicos de la Universidad de Barcelona también alertan sobre el grave impacto ecológico del proyecto de Baqueira-Beret.

La plataforma ecologista presentó hace un año una alternativa a la ampliación para salvaguardar el ecosistema de la zona afectada: facilitar el acceso de los esquiadores a las actuales pistas desde el municipio de Alt Àneu con la instalación de un telesilla de 3,5 kilómetros de recorrido.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_