El Ejecutivo culpa a las autonomías de que no tengan presencia en Bruselas

El Gobierno está abierto a que las autonomías puedan enviar un representante, dentro de la delegación española, a los Consejos de Ministros de la Unión Europea que les afecten, pero advierte de que para ello deben facilitar una cooperación que no prestan, según afirmó ayer el secretario de Estado para Europa, Ramón de Miguel, ante la Comisión Mixta del Congreso y el Senado para Europa.La cooperación es imprescindible tanto para definir las posiciones negociadoras -asunto en el que la última palabra corresponde al Gobierno, precisó el secretario- como para seleccionar al representante, siempre único, cuando haya más de una autonomía interesada en un tema. Este último aspecto, que los Estados alemanes resuelven en el Bundesrat, la Cámara federal, encuentra una dificultad institucional en España que podría resolverse si el Senado se convirtiera en Cámara de las Autonomías.

La fijación de posiciones debería realizarse, en cambio, en la conferencia que reúne aproximadamente cada dos meses a los representantes autonómicos con la Administración central para coordinar temas europeos. En medios gubernamentales se lamenta que algunas de las principales autonomías descuiden sistemáticamente estas citas.