Los firmantes del pacto buscan el apoyo de los rectores universitarios, la Iglesia y la CEOE

El logro de adhesiones de organizaciones sociales en el ámbito nacional y la difusión internacional del pacto contra ETA serán las primeras tareas de su comisión de seguimiento que hoy se constituye en el Congreso. Una vez logrado el apoyo sindical, que se materializará el miércoles, el PP y el PSOE tratarán de conseguir la adhesión al acuerdo contra ETA del Consejo Rector de Universidades, la Conferencia Episcopal, la patronal CEOE y el Consejo de la Juventud. En el campo internacional, el PSOE planteará al PP una campaña de difusión del pacto ante la Comisión Europea.

Apoyos internacionales

Tanto populares como socialistas plantearán iniciativas en la comisión de seguimiento del pacto contra ETA con el objetivo de que adquiera "vuelo social" y se convierta en un instrumento útil en la lucha contra el terrorismo. Hoy, en la agenda de la primera reunión de la Comisión de seguimiento del pacto figura como prioridad, una vez constituida la propia comisión, el estudio de iniciativas de difusión del pacto en los ámbitos nacional e internacional.Tras esta pretensión está el referente anterior del Pacto de Ajuria Enea que desde enero de 1988 hasta su final, en 1998, se convirtió en un instrumento de movilización social y emblemático de la lucha cívica contra ETA. Los integrantes de este nuevo pacto quieren dar un paso más y pretenden moverse activamente para lograr adhesiones nacionales e internacionales al pacto. Ayer cinco asociaciones pacifistas expresaron su adhesión al pacto: Movimiento contra la Intolerancia, Foro Ermua, Foro del Salvador, Asociación de Víctimas del Terrorismo y Asociación Catalana por la Tolerancia.

Populares y socialistas abordarán, previsiblemente hoy, en la comisión de seguimiento del pacto, la reclamación del apoyo de las organizaciones sociales. En la agenda de los socialistas figuran como prioridades el mundo de la universidad -el Consejo Rector de Universidades-; de la Iglesia -la Conferencia Episcopal-, de la juventud -Consejo de la Juventud- y de los empresarios -la Confederación Española de Organizaciones Empresariales-. Para mañana, miércoles, ya está concertado un encuentro entre los firmantes del pacto y los líderes de los dos principales sindicatos, UGT y Comisiones Obreras.

Otra de las prioridades, que figura en la agenda del PP y del PSOE para hoy es abordar iniciativas en el campo internacional. Ambos partidos creen que en este terreno, y sobre todo en el de las instituciones europeas, existe aún un campo importante por explorar para aislar a ETA y despojarle de sus apoyos internacionales.A tal fin, socialistas y populares empezarán por dar a conocer a fondo la situación política del País Vasco sobre la que, estiman, existe aún mucho desconocimiento en Europa. EL PSOE pretende, concretamente, que se exponga ante el responsable de Justicia de la Comisión Europea el alcance del pacto contra ETA, con la grave situación política por la que atraviesa Euskadi como telón de fondo.

La intervención de Fernando Savater, en nombre de ¡Basta ya!, la pasada semana, en el Parlamento de Estrasburgo, en la que denunció a ETA y los compromisos del nacionalismo con organizaciones afines a la banda, fue un aldabonazo en la dirección de lo que les gustaría hacer a los firmantes para que las instituciones europeas comprendan la gravedad de la situación política del País Vasco.

Otra iniciativa paralela consiste en explicar también el contenido del pacto contra ETA al Gobierno y a los partidos políticos franceses. Aunque la implicación de Francia en la lucha contra ETA es creciente desde mediados de los años ochenta, el PP y el PSOE estiman que el Ejecutivo de París aún puede comprometerse más.

Los socialistas están convencidos que el conocimiento detallado por las autoridades europeas de la situación vasca que refleja el pacto contra ETA y la imagen de unidad que ofrecen entre un Gobierno de centro-derecha, perteneciente a la Internacional Democristiana, y una oposición socialdemócrata, perteneciente a la Internacional Socialista, pueden reforzar de manera decisiva la cooperación internacional, sobre todo europea y francesa, que son las más decisivas en la lucha contra el terrorismo.

Al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, no le supone ningún complejo que se le acuse de internacionalizar el problema vasco. Su criterio es que si se plantea correctamente puede ser muy eficaz en la lucha contra ETA. Reiteradamente ha manifestado que debe haber mayor implicación de la lucha contra el terrorismo en el ámbito de la UE y, especialmente, en Francia. Otra de las prioridades de los socialistas consiste en una ofensiva ideológica y cultural, en coordinación con la UE, en defensa de los valores democráticos, dirigida especialmente a los jóvenes vascos para evitar que sean cantera de ETA.

La comisión de seguimiento del pacto se constituirá hoy con cuatro representantes por el PP -su secretario general, Javier Arenas; los portavoces del Congreso, Luis de Grandes, y del Senado, Esteban González Pons, y su presidente vasco, Carlos Iturgaiz- y otros cuatro por el PSOE: Jesús Caldera, portavoz parlamentario; Alfredo Pérez Rubalcaba, diputado; Nicolás Redondo, secretario general del PSE y la secretaria de Educación y Cultura, Carmen Chacón. En una próxima reunión se incorporará la representación del Gobierno: el ministro del Interior, Jaime Mayor, y el secretario general de la Presidencia, Javier Zarzalejos.