"Si CDC quiere ganar las elecciones aceptará a Duran como candidato"

Antoni Castellà (Barcelona, 1970) ocupa la presidencia de la Unió de Joves y ha sido uno de los más destacados redactores de la ponencia que Unió debe aprobar en su congreso de mañana. Declarado independentista, Castellà está convencido de que Convergència aceptará finalmente a Duran como candidato si desea que CiU gane las próximas elecciones autonómicas.Pregunta. Tras el trámite de enmiendas, la ponencia que debe discutirse en el congreso ha incrementado su tono nacionalista.

Respuesta. El tono nacionalista de esta ponencia es el mismo que el de otros documentos aprobados con anterioridad, en concreto el del congreso de Sant Cugat de 1997. Ahora, en esta ponencia no se pretendía redefinir el modelo de nacionalismo; por tanto, ha sido un texto muy abierto en sus planteamientos y en el que ha participado sobre todo la militancia. Muchas enmiendas han insistido en que volviéramos a incorporar estos planteamientos nacionalistas en la ponencia, que en principio los dábamos por asumidos.

P. ¿Qué ha sucedido entre CiU para que una luna de miel se convirtiera en una luna de hiel?

R. No puede obviarse que en las últimas elecciones al Parlament el acuerdo entre la coalición fue fundamental para ganar las elecciones a pesar de las reticencias para que Duran ocupara el número dos de la candidatura. Aunque ocupó el número ocho, Duran se significó como número dos y realizó una aportación muy importante para que Pujol pudiera ganar las elecciones. Después, entramos en un proceso en el que se tenía que redefinir claramente el papel de la coalición y el mensaje de esas elecciones, que las ganamos en el sentido de que el pueblo de Cataluña nos concedió una prórroga. Es decir, rectificar los errores y recuperar el espacio político que siempre ha tenido CiU. Unió cree que en este proceso del pospujolismo uno de los activos más importantes que podemos aportar es la figura de Duran Lleida. En cambio, quedó claro en el congreso que CDC quiere aportar a Artur Mas. Esto comporta un conflicto. Y el tiempo juega en contra de nosotros.

P. Cuando dice "en contra de nosotros", ¿a quién se refiere?

R. A CiU. Las elecciones serán en 2003. Todo indica que el presidente Pujol no volverá a presentarse y si la coalición quiere mantener el espacio político que siempre ha ocupado tendrá que buscar un candidato, y un candidato no se improvisa. Cuanto antes lo elijamos, antes podremos pasar la página a esta etapa de tensiones. Pero estoy seguro de que si ahora no estuviéramos viviendo una etapa de pospujolismo no hablaríamos de replantear las herramientas de la coalición, porque el proyecto ha funcionado hasta ahora reunido bajo un activo tan importante como el de Jordi Pujol.

P. ¿Cuántos corredores quedan en este carrera hacia la candidatura a la presidencia de la Generalitat?

R. En CiU se visualizan dos activos: Duran Lleida y Artur Mas. Pero no podemos reducir todo el debate a la competitividad entre dos personas. Flaco favor le haremos a la coalición. Duran nunca ha puesto un ultimátum, se ha ofrecido a los dos partidos, tanto a Unió como a CDC.

P. Y Artur Mas, ¿se ha ofrecido o se quiere imponer por ser el candidato del partido mayor?

R. El problema es que no ha habido un debate para elegir al mejor candidato. Pero en cualquier caso, estoy plenamente convencido de que CDC, si quiere que CiU gane las próximas elecciones al Parlament, acabará aceptando a Duran Lleida como candidato.

P. Un independentista como usted, ¿qué hace en Unió?

R. Liderar las juventudes. Y ahora, por ejemplo, cuando mucha gente habla de soberanismo, no conozco a una persona más soberanista que Carrasco i Formiguera, uno de los fundadores de nuestro partido.