Francia entregará la próxima semana a Santi Potros, instigador de la matanza de Hipercor
La justicia francesa entregará la próxima semana al dirigente de ETA Santiago Arrospide Sarasola, Santi Potros, para que sea juzgado en España por haber ordenado presuntamente varios atentados, entre los que destaca la matanza de Hipercor, ocurrida el 19 de junio de 1987 en Barcelona, en el que murieron 21 personas y otras 42 resultaron heridas. Francia entregará también la semana que viene a los etarras Nagore Mugika, integrante del comando Txalaparta, y Serafín Blanco González, presunto experto en el paso de fronteras y sospechoso de participar en la conspiración para asesinar al Rey.
Rechazo inicial
Santi Potros, de 52 años y natural de Lasarte (Guipúzcoa), el jefe de los comandos ilegales (fichados por la policía) de ETA entre 1981 y 1985, será entregado el jueves 21. Tras la detención de Juan Lorenzo Lasa Mitxelena, Txikierdi, formó parte de la dirección de ETA, junto con Francisco Mugika Garmendia, Pakito, y José Antonio Urrutikoetxea Bengoetxea, Josu Ternera. El dirigente terrorista tuvo el mando del comando itinerante, integrado por etarras franceses, y que dependía directamente del máximo responsable de la organización hasta septiembre de 1987, cuando fue detenido en Anglet (sur de Francia).Santi Potros está considerado como el instigador de numerosos crímenes cometidos por comandos de ETA en España y también de haberles provisto de los materiales -armas, explosivos, co-ches- necesarios para su ejecución. Así, el Tribunal de París aceptó la extradición de Santi Potros como inductor del atentado en Hipercor y mantuvo las acusaciones de 21 asesinatos consumados, lesiones y daños que pesan contra él como consecuencia de aquella matanza.
Atentado contra Aznar
Sin embargo, el tribunal rechazó la entrega de Arrospide por los delitos de pertenencia a banda armada y tenencia de explosivos. El primero de estos delitos era considerado político en 1990, cuando se accedió a la extradición, y en la actualidad es equiparable a la asociación de malhechores, delito por el que Santi Potros ha pasado en prisión los últimos 13 años en Francia. Respecto de la tenencia de explosivos, el tribunal consideraba que no había pruebas suficientes para incriminarle por ese delito.La extradición por la matanza de Hipercor fue denegada en un principio por las autoridades francesas debido a que Santi Potros disfrutaba de la condición de refugiado político, estatuto que le fue retirado en 1989.
El dirigente etarra está acusado también del asesinato frustrado del ex presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo Antonio Hernández Gil, ocurrido el 8 de mayo de 1986. La acción, según el arrepentido Juan Manuel Soares Gamboa, le fue encomendada por Potros al jefe del comando Madrid, Ignacio de Juana Chaos, quien dispuso de un vehículo con tres lanzagranadas en la plaza de los Sagrados Corazones de Madrid que se activaba con un mando a distancia. Aunque una de las granadas perforó la chapa del vehículo y se alojó en el maletero, no llegó a estallar.
También está imputado por haber ordenado al comando itinerante el atentado contra la Dirección General de la Guardia Civil cometido en mayo de 1987 y que produjo la muerte de una persona.
Asimismo, entre otros delitos, Santi Potros será juzgado por el atentado con coche bomba contra un microbús de la Guardia Civil que realizaba el relevo de la guardia en la prisión de Wad Ras, en Barcelona, que causó graves lesiones a varios agentes. La justicia francesa tiene previsto entregarle a las autoridades españolas el próximo día 21.
Las autoridades galas también prevén entregar el día 22 a Nagore Mugika, de 34 años, compañera del dirigente etarra Juan Carlos Iglesias Chouzas, Gadafi, con quien tuvo una hija en México en 1995. Mugika fue condenada a seis años de prisión en Francia en octubre de 1998 por asociación de malhechores para preparar atentados terroristas, y se suponía que hasta que no cumpliera esa condena no podría ser entregada a la justicia española.Sin embargo, la colaboración francesa permitirá que sea entregada la próxima semana para que sea juzgada por su integración en el comando Txalaparta, con el que habría participado en 15 atentados entre 1990 y 1991.
En 1994 se le consideró integrada en el comando itinerante, aunque este extremo nunca pudo ser contrastado. Mugika fue sospechosa de haber participado en el atentado contra el presidente del Gobierno, José María Aznar, cuando todavía era jefe de la oposición.
Serafín Blanco, de 51 años, que será entregado el próximo lunes, fue condenado en Francia por la conspiración para asesinar al Rey en Palma de Mallorca, aunque en España está acusado de haber alojado en su casa a varios miembros de ETA. Blanco fue detenido en Hendaya (Francia) en 1995 y estaba considerado un experto mugalari (especialista en el paso clandestino de la frontera).
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