Redondo se reunirá esta semana con Ibarretxe para explicarle el pacto y reclamar elecciones

El secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros, se entrevistará esta semana con el lehendakari Juan José Ibarretxe para explicarle el alcance del pacto contra ETA, que su partido firmará mañana con el PP, e invitarle a adelantar las elecciones vascas. La primera preocupación de los socialistas, que ya contaban con una reacción hostil del nacionalismo vasco al pacto antiterrorista, es lograr que entienda que el acuerdo ni condena su ideología ni va dirigido contra él sino contra ETA. La segunda, y la más importante a largo plazo, es mostrar la utilidad del pacto.

Nicolás Redondo, que ha sido un activo participante en la negociación del pacto contra ETA, manifestó que el objetivo de su entrevista con Ibarretxe es doble, reclamarle el adelanto electoral y explicarle el alcance del pacto, que no es hostil al nacionalismo como ha señalado el propio Ibarretxe, sino a ETA.Redondo, consciente de que el PNV maneja la posibilidad de aplazar la convocatoria de elecciones, insistirá a Ibarretxe en que las adelante "no sólo porque está en minoría y pierde la mayoría de las votaciones sino porque hay que cerrar cuanto antes la etapa del pasado que es el Pacto de Estella". El líder del PSE está convencido de que el PNV no rectificará los postulados del Pacto de Estella antes de las elecciones.

Redondo sabía que la primera reacción del nacionalismo vasco al pacto iba a ser hostil. No obstante, defiende, y así se lo hará constar a Ibarretxe, que el pacto era "necesario e inevitable" porque la sociedad vasca y la española, en plena ofensiva terrorista, demandaban un referente que "traslade confianza y seguridad a los no nacionalistas, pero también a los nacionalistas democráticos en la lucha contra ETA".

Redondo también explicará a Ibarretxe que el pacto contra ETA, que representa al 80% de la sociedad española y al 50% de la vasca, responde en el terreno político al esfuerzo organizador que han realizado los sectores más activos de la sociedad con la creación de numerosas plataformas pacifistas y contra ETA, sobre todo, tras las movilizaciones de Ermua, de julio de 1997. "La gente nos reclamaba en la calle a los partidos la unidad democrática y tengo que agradecer la inteligencia y la comprensión a esta demanda de la nueva dirección de mi partido y, sobre todo, de José Luis Rodríguez Zapatero", dice Redondo.

El dirigente socialista vasco explicará asimismo a Ibarrexte el interés primordial del PSOE por sumar adhesiones al pacto, porque éste "es el primer paso para la reconstrucción de la unidad democrática que los ciudadanos nos piden", señala Redondo.

En el terreno político habrá un esfuerzo conjunto del Gobierno y del PSOE para que el resto de las fuerzas democráticas, incluido el PNV si rectifica, se sumen. En la propia gestación del pacto, el PSOE ha tenido puntualmente informado al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol.

Redondo recuerda que el pacto tiene diez puntos de acuerdo y un preámbulo que condena la participación del PNV en foros comunes con organizaciones que apoyan a ETA. "Si las circunstancias cambian, si el PNV rompe con el Pacto de Estella, ese preámbulo puede cambiar. Queremos un PNV democrático, al del Pacto de Ajuria Enea, al que se enfrentaba al terrorismo y defendía la pluralidad en Euskadi", señala Redondo, quien concede especial importancia al papel que puede jugar el acuerdo -como sucedió con el de Ajuria Enea-en "la dinamización de la sociedad vasca" contra ETA.

Este pacto, como aquél, puede animar a la movilización en las calles vascas, pero también a "la expansión de valores como la libertad, la solidaridad y el respeto al diferente, dirigidos sobre todo a los más jóvenes", a los que el pacto dedica uno de sus diez apartados, dice Redondo.

En un terreno más operativo, el de la estrategia contra ETA, los socialistas defienden la activación de la comisión de seguimiento del pacto, a la que le ven muchas posibilidades para acosar al terrorismo. Sobre todo en el área internacional, y más específicamente en los países de la UE y Francia. "La suma de esfuerzos del PP y PSOE en el área internacional puede hacer mucho daño a ETA", señalan fuentes de la dirección socialista.