La policía cerrará las calles del centro en Navidad cuando los aparcamientos estén llenos

El pleno municipal aprobó ayer, a propuesta de la oposición, algunas medidas que se pondrán en marcha a partir de la próxima semana para que el centro no se convierta durante las navidades en una ratonera. La Puerta del Sol se cerrará a los turismos hasta las 21.00 -una hora más de lo habitual-, y la policía impedirá el acceso de los coches al centro cuando los aparcamientos estén llenos. Habrá más autobuses, aunque ninguna línea especial, mientras que los carriles-bus estarán protegidos por conos de plástico, de cuya conservación y vigilancia se ocuparán motoristas de una empresa privada.

Autobús gratis, no

El grupo de IU, apoyado por el del PSOE, reclamó que durante el periodo navideño (del 15 de diciembre al 10 de enero) "se cierren al tráfico la Puerta del Sol y las calles adyacentes, fundamentalmente las de Carretas y la plaza del Celenque, situada detrás de El Corte Inglés, reservándolas exclusivamente para peatones, transporte público y ciclistas de 12.00 a 21.00".IU calcula en 100.000 las personas que atravesarán a diario la Puerta del Sol en Navidad. El PSOE, por su parte, criticó que, aunque la plaza se encuentra cerrada al tráfico privado entre las 12.00 y las 20.00 durante todo el año, esta prohibición se incumple por falta de vigilancia.

El concejal de Circulación, Sigfrido Herráez, del PP, aceptó ampliar en una hora, hasta las 21.00, el cierre de la Puerta del Sol a los vehículos privados y se comprometió a aumentar la vigilancia policial para evitarlo. El edil aseguró que en el futuro se va a intensificar la vigilancia. Herráez, sin embargo, consideró "imposible" el cierre de las calles adyacentes, ya que "los coches no podrían salir de los aparcamientos".

El alcalde, José María Álvarez del Manzano, intervino para pedir a su edil que buscase alguna solución para garantizar la seguridad de los madrileños que se aglomeran en la plaza del Celenque ante el montaje navideño de Cortylandia. Tanto Herráez como María Tardón, concejal de Policía Municipal, asintieron a esa propuesta. De esta manera, también durante el periodo navideño, esta zona quedará cortada al tráfico. "La salida del aparcamiento que da ahí se desviará por otro lado", especificó el concejal de Circulación.

No será ésta la única medida que el Ayuntamiento pondrá en marcha para impedir que el atasco se adueñe de la ciudad en esas fechas. Este año no habrá una línea de autobús especial y gratuita, como la que hubo el año pasado, para viajar por la almendra central durante la época navideña, debido a la poca aceptación que obtuvo entre los madrileños (fundamentalmente por el desconocimiento y la poca publicidad que se hizo). En su lugar, se incrementará "considerablemente" el número de autobuses de las líneas regulares que discurren por el centro y "se les pondrá algún distintivo para señalarlos", según el concejal de Circulación. Además, se protegerán los carriles-bus de determinadas calles ("las del centro y las comerciales", según Herráez), colocando conos de plástico cada cuatro metros. Grupos de vigilantes privados, en motocicleta, se ocuparán de custodiar estos carriles-bus y de reponer los conos que previsiblemente pueden ser derribados o aplastados por los automovilistas. Fuentes de la Policía Municipal, tras considerar que estos conos "pueden provocar accidentes", no se explican que los vigilantes privados sean capaces de reponer los conos fácilmente, ya que "es difícil llevar en una moto esos artilugios".

La medida servirá además de experimento: si funciona, después de las navidades se instalarán unas barreras fijas y abatibles que protegerán los carriles-bus. La Policía Municipal, como el año pasado, cortará el acceso a calles del centro según se vayan llenando los aparcamientos subterráneos. El año pasado, la fecha de la puesta en marcha del dispositivo antiatascos en navidades se adelantó unos días debido a que los automovilistas madrileños invadieron el centro antes de lo previsto. En esta ocasión, la Policía Municipal empezará a imponer restricciones a partir del próximo puente de la Constitución.

- Taxis a 700 pesetas. El aumento de las tarifas del taxi enfrentó a la oposición con el edil de Circulación. Julio Misiego, de IU, consideró desproporcionada la subida (un 7%). Las tarifas crecen hasta un 233% en los suplementos especiales de Nochebuena y Nochevieja. "Montarse en un taxi esos días, sin andar ni un solo metro, va a costar 710 pesetas", afirmó Misiego. "Eso va a costar sólo esos días, pero hemos suprimido otros suplementos: el de la plaza de toros, campos de fútbol, Club de Campo, club de tiro de pichón de Somosaguas...", replicó Herráez.

- Vertedero. El PP presentó para su aprobación la adjudicación a la empresa Vertresa del sellado y la regeneración del vertedero de Valdemingómez. El concejal del PSOE Rafael Merino votó a favor,pero objetó: "En lo que no estoy de acuerdo es en lo de gastarse el dinero en crear un parque de pinos y almendros encima y al lado del vertedero. No van a crecer porque el terreno es calizo". Sellar el vertedero costará 15.600 millones en tres años. Gerardo del Val, de IU, acusó al PP de regalar "8.000 millones a una empresa" y pidió que la adjudicación se dividiera en dos: "Una para la parte de desgasificación y sellado del vertedero y la otra para la rehabilitación".

- Ayudas fiscales a parejas de hecho. El pleno pasó de puntillas por un punto polémico: la aprobación de exenciones fiscales a las parejas de hecho, medida con la que no está de acuerdo el interventor municipal, Vicente Arnau. Estos beneficios, a los que se podrán acoger las parejas de hecho, repercuten sólo en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (rebaja de hasta un 90% al heredar un inmueble).