La presencia de la mujer en las élites políticas valencianas se dispara en apenas diez años

En un estudio realizado en 1986, el 14% de las mujeres confiaban más en los varones que en ellas para ocupar cargos públicos. En la actualidad, este porcentaje se ha reducido al 5%. La mujer tiene mayor confianza en sus propias posibilidades y ha incrementado de forma notable su presencia en las instituciones públicas y en las élites políticas valencianas en los últimos años. Es la principal conclusión de una investigación de la socióloga Inmaculada Serra Yoldi publicada en el último número de la Revista Valenciana de Estudios Autonómicos.

Pese a que su presencia en la participación política dista mucho de ser igualitaria a la del hombre, en los últimos diez años se observa un incremento notable del número de mujeres que se dedican de forma activa a la política, de acuerdo con los datos del estudio realizado por la profesora del departamento de Sociología y Antropología Social de la Universidad de Valencia, Inmaculada Serra Yoldi. La causa es multifactorial. El desarrollo económico, unido al desarrollo educativo, así como la presencia en las instituciones de partidos que han asumido el discurso feminista y el cumplimiento de una serie de cuotas de participación femenina en el seno de estas organizaciones son los agentes que han propiciado esta eclosión.La investigación aborda la participación de la mujer en el ámbito político nacional, autonómico y local, y a tenor de los datos manejados, la política municipal es la que mayor interés le despierta, aunque en los tres casos se experimenta un aumento considerable. "En algo más de una década", afirma la autora, "ha cambiado la fotografía política en la Comunidad Valenciana. La cultura de las mujeres, actitudes, intereses y valoraciones, ha sufrido modificaciones positivas. Lo público ya no es cosa de hombres", proclama.

En el Congreso de los Diputados, de una presencia femenina del 6,6% (23 diputadas) en el año 1986, se ha pasado a un 28% (98 diputadas) en las últimas elecciones de marzo de 2000. Asimismo, en el Cámara Alta se ha incrementado el número de senadoras, pasando de 16 (5,6%) a 63 (24,41%) en el mismo período.

Mientras que el porcentaje sobre la presencia femenina en las Cortes Valencianas era relativamente bajo en los años ochenta, en la década siguiente se inicia una tendencia de crecimiento, que ha continuado hasta las últimas elecciones celebradas en junio de 1999. En apenas poco más de diez años, se ha pasado de un 5,6% de presencia femenina (cinco diputadas) a un 40,4% (36 diputadas) en la actualidad. En cuanto a la actividad parlamentaria, se produce una disparidad participativa en algunas comisiones. Así, la Comisión de Economía, Presupuesto y Hacienda, junto a la de Obras Públicas, presentan una participación de mujeres muy baja, mientras que la Comisión de Mujer está totalmente integrada por parlamentarias. En cuanto datos referidos a nivel o rango, el estudio cifra en el 32,29% el porcentaje de altos cargos contabilizados en el Consell.

En las candidaturas a las Cortes Valencianas de 1999 se presentaron 162 mujeres, lo que se traduce en una presencia del 36,40%. Por provincias, Alicante presenta un porcentaje del 35,33%; Valencia, del 36,21% y Castellón, el más elevado, del 38,18%. El estudio resalta que la posición en la que aparecen las candidatas es,principalmente, el segundo puesto, no ocupando hasta ahora en ningún caso el primero.

Por lo que respecta a los municipios, la presencia de la mujer ha pasado del 6,11% al 26,76% actual, con un total de 1.449 concejales. Este aumento se ha producido sobre todo en las poblaciones menores de 50.000 habitantes. En este sentido, cada vez hay más alcaldesas en la Comunidad Valenciana, pasando del 4% del año 1991 al 12% de 1999, lo que supone un incremento de ocho puntos.

Según la conclusión de profesora Serra Yoldi, se trata de la consolidación de un proceso que comenzó de forma tímida en la década de los ochenta y que en esta última década "está ya consolidado".