LAS PLUMAS DE LA REINA
La reina Isabel II de Inglaterra, fotografiada la pasada semana cuando retorcía el cuello a un faisán en el curso de una cacería, se presentó ayer en un acto celebrado en la Universidad de Cambridge tocada con un sombrero adornado con plumas de... faisán. Para los expertos en los temas de la casa real británica, el hecho de que la soberana luciera, en menos de una semana, un sombrero con tales adornos no es una mera coincidencia, sino que lo consideran una burla tácita de la reina a sus detractores. Tras la publicación de la foto de la real cazadora, el palacio de Buckingham valoró en un comunicado que "era la forma más humana y más eficaz de poner fin a los sufrimientos del pájaro herido". Claro, que el mismo día Isabel II acudió a una ceremonia religiosa tocada con un sombrero con plumas de faisán. Entonces varias asociaciones de defensa de los animales expresaron su consternación y su cólera. Ayer la reina visitó la nueva Facultad de Teología del campus de Cambridge y cubría su cabeza con un sombrero adornado también con plumas de faisán. La policía esperaba alguna acción de protesta por parte de dichas asociaciones, pero la visita terminó sin incidente alguno. La caza, una de las pasiones de la familia real, encuentra cada vez más oposición.-
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