El Gobierno catalán reconoce desvíos en el 'caso Pallerols' y la oposición quiere reprobar a Pujol

La Intervención de la Generalitat ha destapado numerosas irregularidades entre 1994 y 1998 en el uso de fondos europeos por parte de las academias de Fidel Pallerols, según un informe entregado ayer al Parlamento catalán, tres años después de que estallara el caso Pallerols, en el que se investiga la presunta financiación irregular de Unió. El informe imputa a Pallerols alteraciones de firmas y desvíos en el uso de las subvenciones comunitarias recibidas para la formación de parados. El Gobierno deberá dar explicaciones de este caso en un pleno que se inicia mañana, en el que la izquierda pedirá la reprobación del Ejecutivo de Jordi Pujol.

"Descontrol"

Aunque el juzgado sigue investigando los presuntos delitos de Pallerols -entre ellos la supuesta financiación irregular del partido de Josep Antoni Duran Lleida-, la Intervención General del Gobierno catalán imputa al empresario andorrano alteraciones en las firmas, dobles signaturas y mal uso de las subvenciones comunitarias por la vía de inflar los gastos. Las auditorías reclaman que Pallerols devuelva 62,2 millones, y proponen que la Generalitat le reclame daños y perjuicios en la causa penal abierta por el Juzgado número 9 de Barcelona contra él.Casi un año después de que el Parlamento catalán ordenase un informe sobre la gestión de los fondos comunitarios para la formación de desempleados, la Intervención General de la Generalitat libró ayer a la Cámara un análisis pormenorizado del uso de estos fondos por parte de Fidel Pallerols, que afecta a sus tres centros -Ceif, And y Teo- y que abarca los ejercicios 1994, 1995, 1997 y 1998. El ejercicio 1996 ya fue auditado y arrojó como resultado que Pallerols debía devolver 70 millones de las ayudas recibidas, aunque no lo ha hecho.

Las conclusiones de la auditoria se refieren al uso de un total de 992,7 millones de fondos para formar parados gestionados por los centros de Pallerols en los años en cuestión. La principal conclusión es que los tres informes confirman e imputan a Pallerols prácticas que no son califcicadas jurídicamente en este informe.

En la causa penal que se sigue contra Fidel Pallerols se investigan, además de los supuestos delitos de falsedad documental, falsificación de firmas y fraude en las ayudas comunitarias, el de financiación irregular a UDC, partido que controla el Departamento de Trabajo de la Generalitat, que es el organismo encargado de repatir los fondos de la UE para formar parados.Después de haber rechazado durante varios años la apertura de una comisión de investigación en el Parlamento, CiU ha tenido que admitir debatir esta cuestión en un pleno de la Cámara catalana después de que la Comisión Europea decidiera bloquear la entrega de una partida de 10.000 millones de este fondo, que luego se redujeron a 6.000.

Los partidos de izquierda propondrán la reprobación del Gobierno de Jordi Pujol, y no sólo del consejero de Trabajo, en el pleno monográfico del Parlamento catalán que se inicia mañana. El Partit dels Socialistes (PSC), Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) consideran que todo el Ejecutivo es responsable del "descontrol" en la gestión de fondos destinados a la formación de parados, aunque no entran a analizar la supuesta financiación irregular de Unió.

Los tres grupos de izquierda sopesan la posibilidad de presentar conjuntamente la propuesta de reprobación a todo el Gobierno, que se votará el viernes en el marco de las conclusiones del debate monográfico. La izquierda subraya que las irregularidades admitidas por la propia Generalitat arrancan del año 1996 y, por tanto, no son responsabilidad del actual consejero de Trabajo, Lluís Franco, que es quien comparecerá en el pleno monográfico que se inicia mañana.

La reprobación, sin embargo, no saldrá adelante, porque necesita el apoyo del Partido Popular (PP), que se ha desmarcado de la iniciativa. Dirigentes significativos del grupo parlamentario popular se pusieron ayer en contacto con los portavoces de la izquierda para hacerles saber que votarán en contra de la reprobación. El PP mantiene además su negativa a facilitar la creación de una comisión de investigación parlamentaria sobre el caso Pallerols, una propuesta reiterada de las formaciones de izquierda. A pesar de que el grueso del PP catalán es partidario de crear dicha comisión, la dirección nacional del PP teme que el escándalo favorezca las posibilidades del socialista Pasqual Maragall.