Los cuatro últimos institutos dependientes del Gobierno central denuncian su estado de abandono Los centros, pendientes de ser transferidos a la Junta de Andalucía, reclaman más profesores

Quedan sólo cuatro en toda España, todos en Andalucía, y se encuentran en una situación que sus responsables califican de precaria. Son los últimos vestigios de los antiguos institutos-patronatos, dependientes de los Ministerios de Educación y Defensa, que a mediados de los años 70 se abrieron por todo el país para dar respuesta a las demandas de los núcleos de población castrense. Casi 30 años después, los responsables de estos cuatro Institutos de Enseñanza Secundaria denuncian que se hayan perdidos entre las dos admnistraciones, que año tras año prometen que serán transferidos a la Junta de Andalucía y que no atienden a sus quejas sobre la falta de profesorado, de personal y las deficiencias de las instalaciones.

"Estamos perdidos entre dos ministerios y dos administraciones". Así explica Julia María García Moreno, directora del instituto Carlos Haya de Sevilla, la situación de abandono en la que se encuentra el centro que dirige y otros tres más de Andalucía -dos en Cádiz y uno en Ronda- que, junto a los de Ceuta y Melilla, aún dependen del Ministerio de Educación y del Ministerio de Defensa. La directora del Carlos Haya encuentra una sóla explicación para justificar esta anómala circunstancia: las diferencias políticas entre el Gobierno central y la Junta de Andalucía. "Año tras año nos aseguran que sí, que por fin va a realizarse la transferencia de estos centros a la Junta de Andalucía, pero eso nunca ocurre", afirma.Las consecuencias de vivir en este anacronismo administrativo son numerosas. En el Carlos Haya, con cerca de 650 alumnos matriculados, casi tres meses después del inicio del curso se sigue sin poder impartir clases de Francés a 130 alumnos porque el Ministerio de Educación alega falta de presupuesto. Además, denuncian que en los últimos cinco años se han amortizado cinco plazas de plantilla argumentando que con la implantación de las nuevas enseñanzas recogidas en la LOGSE disminuía la necesidad de profesorado en estas especialidades, "pero no se ha procedido a ampliar la plantilla en las enseñanzas que experimentaban un incremento de horas como el Francés, Lengua o Literatura", indica Julia García.

Esta situación se repite en los dos institutos gaditanos. En el Fuerte de Cortadura, con 700 alumnos, siguen faltando tres profesores de Ciencias Naturales, Filosofía, y Francés y Música. La ausencia de este primer docente está provocando que tres cursos de COU, con más de 100 alumnos, aún no hayan iniciado las clases de Geología, de la que se examinarán en selectividad. La situación es aún "más sangrante", según el director, Francisco Molina: el curso comenzó con la baja por enfermedad de 16 profesores que no han sido sustituidos hasta hace unos días.

En el instituto Wenceslao Benítez de San Fernando, donde estudian 620 jóvenes, son también tres las plazas que no han sido cubiertas. Un grupo de COU no tiene clases de Inglés, mientras que el grupo de alumnos que pertenecen al programa de diversificación curricular carecen de la especialista que les debe impartir las clases de Lengua, Inglés y Sociales. La tercera plaza por cubrir es la de la asignatura de Matemáticas. Los directores de los centros acusan directamente al Gobierno central de hacer dejación de sus funciones, al tiempo que lamentan que la Junta de Andalucía haya impuesto unas condiciones "muy drásticas" para recibir la titularidad de estos centros. "Aquí ha venido un arquitecto enviado por Defensa y dijo que había que echar abajo el centro. Hasta que estén en óptimas condiciones será difícil que la Junta los reclame", afirma Julia García.