El Gobierno concederá dos nuevas licencias de móvil GSM para ampliar la competencia

El Consejo de Ministros zanjó ayer el enfrentamiento que mantenían el Ministerio de Economía y el de Ciencia y Tecnología a propósito de las nuevas licencias de telefonía móvil. El Ejecutivo concederá finalmente dos nuevas licencias de tecnología móvil GSM 1800 (la que ofrecen las compañías en estos momentos). Los nuevos adjudicatarios se sumarán a los tres que ya operan con esta tecnología (Telefónica, Airtel y Amena).

El Consejo de Ministros zanjó ayer el enfrentamiento que mantenían el Ministerio de Economía y el de Ciencia y Tecnología a propósito de las nuevas licencias de telefonía móvil. El Ejecutivo concederá finalmente dos nuevas licencias de tecnología móvil GSM 1800 (la que ofrecen las compañías en estos momentos). Los nuevos adjudicatarios se sumarán a los tres que ya operan con esta tecnología (Telefónica, Airtel y Amena). La medida forma parte de un paquete de decisiones que aprobó ayer el Consejo de Ministros para aumentar la competencia en el sector de la telefonía móvil.Con la decisión de otorgar dos nuevas licencias de móviles GSM, la ministra de Ciencia y Tecnología, Anna Birulés, ha ganado la batalla al titular de Economía, Rodrigo Rato. El vicepresidente segundo era partidario de ampliar el mercado con nuevos operadores de UMTS, tecnología móvil de tercera generación que permitirá un acceso rápido a Internet y, por tanto, más avanzada que el actual sistema GSM. El Gobierno español ya concedió en marzo cuatro licencias UMTS, dos días antes de las elecciones, y en medio de una polémica que ha ido intensificándose estos últimos meses.

Una de las posibilidades que se contemplaban dentro de las medidas para ampliar la competencia era la de abrir más el abanico de los operadores de UMTS. La ministra siempre mantuvo que el espacio radioeléctrico no daba cabida a más de cuatro operadores, una tesis que finalmente ha triunfado.

Curiosamente, Birulés vio su propuesta aprobada en el Consejo de Ministros de ayer, al que Rato no asistió por encontrarse de viaje oficial en China. El jueves de la semana pasada, la Comisión Delegada para Asuntos Económicos, ante el enfrentamiento entre ambos ministerios, incluyó el tema en su lista roja de asuntos que debe dilucidar directamente el Consejo de Ministros, como sucedió ayer.

El espacio radioeléctrico

Birulés se encargó de insistir en que el espacio radioeléctrico disponible hoy no tiene por qué ser el mismo dentro de unos años. Es decir, que si el Gobierno reasigna el espectro con el que cuenta España, en el futuro podría haber más espacio disponible para otras licencias de telefonía móvil, ya sea UMTS o de cualquier otro tipo.El mercado español no va a tardar en conocer a los nuevos operadores de telefonía GSM. El Ejecutivo convocará el concurso para adjudicar las licencias en el primer cuatrimestre del año que viene para que "antes de final de 2002" los operadores ya estén prestando sus servicios.

El éxito de mercado que obtengan los dos nuevos operadores de GSM dependerá en parte del tipo de servicios que puedan prestar, en comparación con los de la tecnología UMTS. Según los compromisos de las compañías, el sistema UMTS debe estar operativo en España en agosto de 2001. Las nuevas empresas de GSM llegarán, como pronto, a finales de 2002. Por lo tanto, existe el peligro de que las prestaciones de estas empresas nazcan ya obsoletas, lo que crea dudas en el sector sobre su viabilidad.

La competencia en el disputado negocio de los móviles no vendrá sólo por la entrada de nuevos operadores con red propia. El Gobierno también aprobó ayer la entrada de nuevos agentes sin red en este mercado, que comenzarán a operar en plazos "relativamente cortos", según la ministra. Los operadores móviles virtuales ofrecerán con su marca un servicio que alquilarán a los operadores con red.

También aparecerá la figura del proveedor de aplicaciones y contenidos, que incrementará el número de servicios de los operadores de móvil. Los revendedores, por su parte, no contarán con marca propia, sino que se dedicarán a comprar minutos de comunicación a los operadores dominantes y revenderlos a un precio más asequible. Finalmente, los usuarios podrán utilizar otras compañías diferentes a la suya para las llamadas internacionales mediante un acceso indirecto que funcionará el mes que viene.