Los padres de un colegio de Jaén cierran las aulas por la presencia de grietas

Los padres de cien alumnos de 8 y 9 años del colegio público Santo Domingo de la capital jiennense se negaron ayer a que sus hijos entren en las clases ante las grietas de hasta seis centímetros que presenta la fachada, la cubierta y los suelos de uno de los módulos de este centro escolar.La secretaria de la asociación de padres y alumnos de este colegio, Clotilde Miranda, explicó que la decisión de no llevar a los niños a clase y de concentrarse se adoptó en una asamblea después de ver que "la Administración no da una solución definitiva a un problema que se arrastra desde hace más de un año". Miranda señaló que el Ayuntamiento de la capital arregló y tapó este pasado verano las grietas de mayor envergadura aparecidas en el edificio, pero "éstas han vuelto a salir y en cada una de ellas se puede meter la mano". "Sólo pedimos seguridad para nuestros hijos, y mientras eso esté así no entrarán", dijo Miranda.

El delegado de Educación, Manuel Jurado, explicó que los técnicos de la Delegación han dictaminado que a pesar de lo alarmante de las grietas "la seguridad de los alumnos está garantizada" y añadió que deberá ser el Ayuntamiento de Jaén el que solucione el problema.

La concejala del área de Educación, Inmaculada Solar (PP), dijo que el Ayuntamiento como responsable del mantenimiento y conservación del colegio volverá a reparar las grietas, pero precisó que el problema del edificio es "un defecto estructural". Por lo pronto, el edificio ha quedado hoy clausurado por la dirección.