Amplia representación institucional en los funerales del Síndic de Greuges

Centenares de personas, la mayoría cargos públicos en representación de las diferentes instituciones valencianas, asistieron ayer a los funerales de Luis Fernando Saura, Síndic de Greuges, que falleció el jueves en Alicante a consecuencia de una parada cardiorrespiratoria. Las exequias fúnebres se celebraron en la concatedral de San Nicolás de la capital alicantina y contaron con la presencia, entre otros, del presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, y del Defensor del Pueblo, Enrique Múgica. Luis Fernando Saura, de 61 años, falleció en la clínica Vistahermosa de Alicante. El Síndic había ingresado en el centro sanitario dos semanas antes para ser intervenido de una oclusión intestinal.

La homilía en memoria de Luis Fernando Saura fue oficiada por el obispo de la Diócesis Orihuela-Alicante, Victorio Oliver. El obispo definió al desaparecido Síndic como una persona "buena, entrañable y noble" y destacó su trayectoria profesional tanto en el ámbito jurídico, como educativo, así como su última función como defensor de los ciudadanos frentes a los agravios de los poderes públicos. Tras las honras fúnebres, los restos mortales de Luis Fernando Saura fueron trasladados al cementerio de su localidad natal, Dolores (La Vega Baja).

El presidente del Consell no escatimó elogios a la hora de glosar la figura de Luis Fernando Saura: "Hoy, afortunadamente, todo el mundo reconoce el trabajo ejemplar de un hombre amante del Derecho y gran profesional", dijo. En el mismo sentido se expresó el Defensor del Pueblo, para quien Luis Fernando Saura ha muerto "ocupando un puesto de gran dignidad que le correspondía", matizó Múgica.

Saura, doctor en Derecho, accedió al cargo de Síndic en septiembre de 1998. Tras su fallecimiento, la Sindicatura la ocupará Emilia Caballero, adjunta primera. No obstante, las Cortes Valencianas han de designar al nuevo Síndic antes de tres meses.