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Recuperados cuatro cuerpos del 'Kursk'

Los buzos rusos y noruegos localizaron ayer cuatro cuerpos en el interior del Kursk, a 108 metros de profundidad, después de abrir el primer gran agujero para poder entrar en el submarino nuclear hundido en agosto. Un buzo ruso se adentró en la octava y la novena cámaras (de las 10 que tiene el sumergible) y encontró los cuatro cuerpos, que fueron colocados en unos contenedores especiales para su salida a superficie. Después de recuperar el cuarto cuerpo, la operación fue suspendida hasta que mejore el tiempo en el mar de Bárents.

El almirante Viacheslav Popov, comandante de la Flota del Norte, a la que pertenecía el Kursk, dijo en un principio que el buzo no pudo adentrarse más allá de seis metros porque su escafandra resultó más ancha que el pasillo. Por lo visto, éste resultó deformado debido a las explosiones que hundieron al Kursk. Sin embargo, Vladímir Navrotski, portavoz de la flota, dio una explicación diferente: señaló que el buzo no pudo adentrarse más porque el tubo que le suministra aire resultó demasiado corto.Ambos oficiales coincidieron en que no se habían encontrado restos humanos, aunque en el momento del naufragio en la octava cámara debía haber siete marinos. Navrotski declaró que quizá los marinos abandonaron la octava cámara o se encerraron en su parte inferior. Pero más tarde, el jefe del Estado Mayor de la Flota del Norte, almirante Mijaíl Motsak, anunció que se habían encontrado tres cuerpos, que fueron subidos a la superficie en contenedores especiales.

El buzo logró también entreabrir la compuerta de la novena cámara, mientras otros submarinistas conseguían abrir la escotilla de salvamento en la popa, que conduce a la novena cámara, e introducir una manguera para limpiarla de restos de aceite, gasóleo y otros productos que dificultan la vista en su interior. Poco después, el buzo descubría el cuarto cadáver.

El Kursk tiene 10 cámaras, de ellas, la primera y la segunda quedaron prácticamente destruidas debido a la explosión que se produjo el 12 de agosto pasado y que causó su hundimiento. El equipo de buzos, compuesto por 12 rusos y 6 noruegos, debe realizar agujeros en todas las cámaras, a excepción de la sexta, que es donde se encuentran los reactores nucleares. Los buzos descienden en una campana especial de a tres: dos rusos y un noruego. El noruego permanece en la campana coordinando las labores, mientras un ruso entra en el sumergible y el otro se queda junto al agujero, listo para acudir en ayuda de su compañero en caso de necesidad.

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