EDF conserva el dominio en Francia pese a la liberalización

Capacidad de elegir

Veintiuno de los más de 1.200 grandes clientes industriales de la compañía eléctrica francesa Électricité de France (EDF) han optado por contratar el suministro de energía con operadores de la competencia. Ésta es la única consecuencia visible de la apertura del mercado eléctrico francés, iniciada a principios de año y que se desarrolla muy despacio. La compañía estima que el 30% de ese mercado ya tiene la posibilidad de elegir otro operador, y que la apertura se extenderá al 34,7% a finales de este año.EDF, propiedad del Estado al 100%, no hizo comentarios a la anunciada fusión de Endesa e Iberdrola en España y la proyectada venta de activos que preparan los nuevos socios. Mientras se mantenga como una empresa pública que conserva un fuerte control sobre el mercado francés le va a resultar muy difícil a EDF jugar un papel en España. Sus 100.000 megawatios de potencia instalada le configuran como el mayor grupo eléctrico del mundo, pero en realidad aparece como uno de los más aislados.

Alemania, los Países Bajos y Reino Unido son mercados hacia los que EDF mira más que al español. Pero Bruselas desconfía de los monopolios eléctricos, como antes desconfió de las monopolios de telecomunicaciones. Así, las autoridades comunitarias no han dado todavía su visto bueno a la compra del 25% de EnBW, el cuarto operador eléctrico alemán, anunciada por EDF a principios de año. Frente a la actitud de Alemania, que comenzó la apertura del mercado a la competencia en 1998 y en el que la guerra de precios ha abaratado la electricidad en más del 35%, el Parlamento francés votó la ley liberalizadora en febrero y aún no se han publicado varios decretos necesarios para la aplicación de la norma.

La compañía asegura estar a favor de que se aceleren los trámites y se reduzcan los plazos para desregular el mercado francés, lo que impulsaría el crecimiento. Su argumento es que el 30% del mercado eléctrico francés ya está abierto "de hecho" a la competencia, porcentaje que representa al sector de grandes clientes industriales; el resto no puede elegir otro operador que EDF.En un plazo de meses, EDF espera que la accesibilidad de los competidores alcance al 34,7% del mercado eléctrico francés, con lo cual se ganarían dos años sobre la apertura programada por la Unión Europea para 2003, según explicaron fuentes de EDF. Ni la compañía ni el Gobierno se plantean la privatización del grupo, cuyas cuentas de 1999 reflejan una cifra de negocios de 32.000 millones de euros (5,3 billones de pesetas).