Una ortodoxa que fue creciendo en rebeldía
Concha Caballero (Baena, Córdoba, 1956) no ha parado de hablar desde las última elecciones. Forjada en la ortodoxia comunista, hasta entonces había callado disciplinadamente, con su sonrisa característica, y eran otros los que se posicionaban ante el declive de IU con críticas a la dirección de Antonio Romero y Felipe Alcaraz. El descalabro electoral fue el punto de inflexión de esta profesora de instituto, licenciada en Filosofía y Letras, que comenzó a cuestionar la trayectoria excluyente de la federación que había propiciado el abandono masivo de corrientes, militantes y electorado.Sus tímidas denuncias de un principio le colocaron en el punto de mira del aparato, que le señaló desde ese momento como una amenaza del equilibrio reinante. Los envites de la parte contraria fueron sacando a flote el perfil más combativo de una Concha Caballero que iba creciendo en rebeldía y aglutinando en su entorno el descontento que, aunque intenso, se dispersaba por una variada gama de matices. La salida batalladora de Caballero hacia la práctica política de su propia organización -faceta hasta ahora desconocida-, con acusaciones a la dirección de escorar el proceso asambleario hacia Diego Valderas, le ha valido una recurrente imputación en IU: la deslealtad.
Diputada desde 1994, su proyección pública procedía del Consejo de Administración de la RTVA, a cuyo nacimiento asistió desde este órgano con un fuerte protagonismo contra la gestión del primer director general del ente, Salvador Domínguez. Como coordinadora de Izquierda Unida en Sevilla, Caballero se ha hecho ver siempre por sus excelentes relaciones con los grupos minoritarios, como Los Verdes, el CAI o el CUT de Juan Manuel Sánchez Gordillo.
Esta especial querencia hacia las apuestas sociales más alternativas, sin abandonar nunca sus profundas convicciones comunistas, ha sido determinante para articular la candidatura que ahora encabeza: el Movimiento por la Recuperación de IU, un canto nostálgico al Convocatoria por Andalucía que creó Julio Anguita, de quien fue responsable de comunicación al aterrizar en Sevilla, y que ahora él apoya en su aventura en la 13ª asamblea. En la lista que encabeza le acompaña muy de cerca Rosa Aguilar, la alcaldesa de Córdoba, más pragmática en la política de alianzas. En las antípodas de Aguilar, viaja también Sánchez Gordillo, detractor radical de un pacto con los socialistas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Starmer celebra el regreso del Reino Unido al programa Erasmus en 2027 como un paso más en el acercamiento a la UE
El documental ‘Justicia capturada’ sobre supuestos abusos de los jueces causa indignación en Rumania
La jefa de gabinete de Trump afirma en una entrevista que el presidente tiene “personalidad de alcohólico”
El subdirector de Emergencias declara que los debates en el Cecopi fueron demasiado largos el día de la dana
Lo más visto
- Elon Musk, más cerca de ser el primer hombre en alcanzar una fortuna de un billón de dólares
- El rechazo de Francia y las dudas de último minuto de Italia amenazan con descarrilar la firma del acuerdo entre la UE y Mercosur
- La UCO precipitó la detención del expresidente de la SEPI porque se percató de que lo seguían cuando iba a una cita con Leire Díez
- Interior nombra jefe de la UCO al coronel Pedro Merino, exintegrante de la unidad y que estuvo destinado en La Zarzuela y Seguridad Nacional
- El Gobierno de Mazón pagó 107 millones de euros más a Ribera Salud al aumentar su aportación por ciudadano




























































