La isla de Malta y La Valldigna estrechan sus lazos históricos

El presidente de la República de Malta, Guido de Marco, anunció ayer, en Simat de la Valldigna, la creación de una asociación hispano-maltesa para estrechar los vínculos históricos entre los dos países. El jefe de estado maltés visitó el monasterio de Santa María de la Valldigna donde mantuvo un encuentro con cerca de trescientas familias descendientes de mercaderes de la isla mediterránea. La mayoría de ellos provienen de comerciantes malteses, que a finales del siglo XVIII navegaron hacia las costas españolas y al norte de África en busca de nuevos mercados donde introducir su comercio de telas italianas. Algunos de los mercaderes emparentaron con familias españolas y se asentaron en la costa mediterránea, principalmente en Alicante, Cartagena, Valencia, Canarias y Andalucía. En la actualidad es muy difícil precisar el censo de familias provenientes de Malta que se instalaron en tierras valencianas, manifiesta Ricard Sicluna, un arquitecto afincado en Valencia cuyos antepasados también procedían de la pequeña isla situada al sur de Sicilia. Pero su huella es fácilmente perseguible por los apellidos que han pervivido varias generaciones. Mifsud, Sicluna, Español, Esquembre, Carbona, Magro, Samit, Vela o Manclús son algunos de los patronímicos descendientes de los mercaderes de Malta, que todavía hoy se conservan en municipios como Aspe, Xàtiva, Tavernes de la Valldigna, Monovar, Orihuela, Novelda, Crevillent, Alcoi o Ibi. En el siglo XIX, con la invasión inglesa de la isla, los mercaderes de Malta trasladaron su comercio a Estados Unidos, Canadá, Australia e Inglaterra y dejaron de visitar los puertos españoles.

El alcalde de Tavernes de la Valldigna, Eugenio Pérez Mifsud, también con origen maltés, hizo entrega al presidente de Malta de la medalla de oro de la ciudad y mostró su deseo de estrechar relaciones entre ambos pueblos. El último encuentro de descendientes malteses se celebró en 1981 en Villena, organizado por Vicente Prat Esquembre, y reunió a más de 400 familias valencianas.