El imparable proceso de concentración eléctrica

El Grupo Endesa, que ahora pretende fusionarse con Iberdrola para conseguir situarse entre las 10 primeras eléctricas del mundo, es el resultado de un continuo proceso de compras. En 1983, cuando estaba bajo el control público, se constituyó el actual grupo, integrado por las empresas del antiguo Instituto Nacional de Industria (INI) tenía en Enher, Gesa, Unelco y Encasur.Fue el pistoletazo de salida de un grupo que, en ese mismo año, se echó a las alforjas Eléctricas Reunidas de Zaragoza (ERZ). El proceso de consolidación se apuntó el siguiente hito en 1991, cuando compró Electra de Viesgo, controlada por el entonces Banco Santander. Ese año también abordó una importante operación de expansión al comprar el 40% de Fecsa, el 35,5% de Sevillana de Electricidad y el 24,9% de Saltos del Nansa. Un año después cerró la compra de 61,9% de Carboex.

En 1993, prosiguió su carrera hacia el volumen ideal con la compra del 55% de Hidroeléctrica de Cataluña y la entrada en el negocio del agua al adquirir el 11,7% de Aguas de Barcelona. En 1996 presentó sendas ofertas públicas de adquisición (OPA) por la totalidad del capital de Fecsa y Sevillana, en una operación que resultó polémica. Pero si esta operación tuvo problemas con las autoridades de competencia, mucho más problemas padeció con su entrada en Chile con la compra del grupo Enersis en 1997.

Un año después, la junta general de Endesa daba el visto bueno a la mayor operación de concentración dentro de un grupo de la historia española al absorber ocho filiales que cotizaban en Bolsa (Sevillana, Enher, Fecsa, ERZ, Gesa, Nansa, Unelco y Viesgo).

Al final, se optó por un modelo de fusión por absorción de cada una de las filiales para lo cual fue necesario realizar una ampliación de capital por valor de 300.000 millones de pesetas. El proceso de desarrollo de Endesa se hizo en paralelo con la privatización, que comenzó en el año 1988, cuando se sacó al mercado el 25% del capital. La segunda puesta en el mercado se produjo en 1994, cuando se decidió vender el 11%. La tercera fase se llevó a cabo en el año 1997 con otro 25% y fue en el año 1998 cuando la empresa se convirtió en totalmente privada, con la venta del 33% que restaba.

Ahora ha llegado el turno de Iberdrola, empresa que fue el resultado de la fusión entre Iberduero e Hidrola.