El PSOE renuncia a enmendar a la totalidad la nueva Ley de Extranjería

Los socialistas presentarán hoy una propuesta para crear en el Congreso una subcomisión sobre inmigración, una vez que el Gobierno ha asumido la idea del secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, de llegar a un pacto sobre inmigración. Esta voluntad de acuerdo ha logrado que los socialistas reconsideren la idea de rechazar de plano la reforma de la Ley de Extranjería puesta en marcha por el Ejecutivo del PP. El PSOE pretende, además, que se legalice a los 50.000 inmigrantes que, según los datos manejados inicialmente por Interior, podrían quedarse fuera del proceso extraordinario de regularización.

El 28 de agosto, el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, remitió una carta al presidente del Gobierno, José María Aznar, en referencia al tema de la inmigración. "Creo que es imprescindible que pongamos en marcha los instrumentos para trazar las líneas que configuren un pacto de Estado sobre inmigración". Zapatero le proponía, además, celebrar una entrevista para "explorar" la viabilidad del proyecto. Lo cierto es que el presidente del Gobierno le contestó en unos términos "correctos pero de gran frialdad", según miembros de la ejecutiva socialista. Aznar no consideraba oportuna una entrevista entre ambos. Prefería que fueran los responsables de los respectivos grupos parlamentarios los que tuvieran los primeros contactos.Pero la percepción un tanto negativa que tuvieron los socialistas, sobre todo porque Aznar no aceptaba de inmediato la celebración de una reunión bilateral, no se correspondió luego con la sensación que han obtenido de las entrevistas entre interlocutores parlamentarios y gubernamentales. El portavoz parlamentario, Jesús Caldera; la responsable de la Ejecutiva Federal de Políticas Sociales y Migratorias, Consuelo Rumi, y la diputada y portavoz de Cooperación, Delia Blanco, vieron desde la primera reunión con Enrique Fernández Miranda, secretario de Estado de Inmigración, que había "voluntad política" de llegar a un acuerdo.

Las sucesivas reuniones de Fernández Miranda y Rumi y el buen clima creado han permitido que los socialistas puedan proponer hoy en el Congreso de los Diputados la creación de una subcomisión en busca de un "Plan Integral de la Inmigración". Ésta es la denominación que ha pedido el Gobierno frente a la del "pacto de Estado sobre inmigración" que solicitaba el PSOE.

En este marco estable tendrán que salir soluciones para la inmigración en las que estén implicados los ayuntamientos, las comunidades autónomas, los sindicatos, los empresarios y las ONG. El PSOE busca que el pacto sea también de todos los grupos políticos, y por eso lo lleva al Parlamento, según afirma Consuelo Rumi.

En paralelo debe discurrir el debate de la nueva Ley de Extranjería que el Gobierno quiere y que los socialistas siguen llamando "contrarreforma" porque modifica la normativa aún en vigor, que aprobaron todos los grupos de la Cámara, con el rechazo del PP, al final de la pasada legislatura.

En el clima de acuerdo que se ha instalado, los socialistas consideran que no deben presentar una enmienda a la totalidad, sino intentar corregirla con parciales. Aunque, en el fondo, no es diferente, ya que se pueden presentar enmiendas a todos los artículos de la ley.

El plazo de presentación de enmiendas parciales termina hoy, aunque previsiblemente los partidos intentarán una ampliación del plazo. El PSOE confiere la máxima importancia a la enmienda en la que se solicitará al Gobierno que legalice a los 50.000 inmigrantes que presentaron su documentación antes de que terminara el plazo del 31 de julio pasado pero que, previsiblemente, no podrán acceder a la regularización extraordinaria porque les ha faltado algún documento.