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LA SITUACIÓN DEL PAÍS VASCO

La familia Korta exige de nuevo explicaciones a los terroristas

Los parientes de José María Korta, el presidente de la patronal guipuzcoana Adegi asesinato por ETA el pasado 8 de agosto en Zumaia, no están dispuestos a quedarse en silencio ante este crimen ni tampoco ante el atentado intimidatorio cometido un mes después contra una discoteca de su familia. Menos aún ante el comunicado de la banda del pasado jueves, en el que justificaban la potente bomba que destruyó la discoteca Txitxarro, propiedad de un hermano del empresario asesinado, por el supuesto consumo de drogas en ella. ETA incluso hacía una confusa reflexión, en tono moralizante, sobre las drogas y la juventud vasca.Por el contrario, la familia de Korta considera que el ataque a la discoteca fue una represalia por sus públicas interpelaciones a la organización terrorista y a Euskal Herritarrok (EH) para que explicaran el asesinato del empresario. Ahora, en vez de achantarse ante la siniestra advertencia, han reiterado en una carta sus interpelaciones a la banda. Así, preguntan porqué ha atentado precisamente ahora contra la discoteca, cuando lleva 24 años funcionando, sugiriendo lo que otros representantes políticos y sociales afirmaron abiertamente: que fue un intento mafioso de acallar sus críticas.

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En su comunicado, los Korta rechazan las imputaciones de la banda e insisten en que la supuesta "existencia de tal problema [la droga]" tampoco sirve para explicar el asesinato de José María Korta ni la destrucción de la discoteca. Korta fue homenajeado ayer en el barrio Arroa-Behea de Zestoa (Guipúzcoa) del que será nombrado hijo predilecto.

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