70 personas acorralan y agreden a dos guardias civiles que perseguían a un ladrón

La Guardia Civil calificó ayer, en una nota de su oficina de comunicación, como una "jauría humana" a las 70 personas que agredieron la noche del viernes a una patrulla integrada por dos agentes del instituto armado cuando se disponían a detener a un delincuente común en Pinos Puente (Granada). El ladrón fue perseguido a pie por uno de los guardias, mientras que el otro le cerraba el paso con el automóvil. Javier C. F., de 23 años, resultó herido tras "estrellarse contra el lateral del vehículo oficial". En ese momento se produjo la reacción vecinal.La nota oficial niega que el perseguido fuera atropellado por el vehículo. Los hechos ocurrieron a las 20.00 horas del viernes cuando la patrulla identificó al autor de varios robos denunciados últimamente. Al ir a detenerle se inició la persecución.

"Al llegar a la altura de la calle Media Luna, desde un callejón contiguo muy pendiente, y perseguido por el guardia civil [de a pie], el delincuente corriendo desesperado fue a estrellarse contra el lateral del vehículo oficial quedando conmocionado y semiinsconsciente", señala la versión oficial del incidente.

Cuando los guardias trataron de "socorrer al herido" apareció una muchedumbre formada por unas 70 personas que "lejos de preocuparse por el herido prefirieron golpear y apedrear a los agente de la autoridad, impidiéndoles que se acercaran a él".

El padre del herido arrancó los cables del radioteléfono y amenazó de muerte a los guardias, que decidieron replegarse hasta el acuartelamiento, "en tanto la jauría humana seguía apedreando, golpeando, insultando y amenazando a los guardias civiles y al vehículo oficial".

De entre los agresores, los agentes identificaron a los padres del delincuente, que han sido detenidos. Los guardias sufrieron contusiones, erosiones, luxaciones y hematomas.