Desalojados vecinos de diez aldeas de Lugo por un fuego de 500 hectáreas

antiago de Compostela Vecinos de varias aldeas de Navia de Suarna, en las montañas de Lugo, fueron desalojados de sus casas en la madrugada del sábado ante la amenaza de las llamas de un incendio forestal que arrasó más de 500 hectáreas. Al menos cinco fuegos continuaban ayer activos en Lugo y Ourense, cuyos bosques están padeciendo uno de los peores veranos de los últimos años. En Pedro Bernardo (Ávila), donde ardía ayer otro incendio provocado, se han perdido 3.200 de sus 3.600 hectáreas de monte público.

Sigue el fuego en Ávila

El incendio de Navia de Suarna (Lugo) se inició el jueves y no quedó extinguido hasta última hora del sábado. Las llamas amenazaron a los vecinos de diez aldeas del municipio, algunos de los cuales tuvieron que ser evacuados, aunque finalmente se evitó que el fuego afectase a sus casas. El incendio llegó a cercar a los miembros de las cuadrillas de extinción. Dos brigadas quedaron el sábado sitiadas por las llamas, sin posibilidad de encontrar una salida por tierra, y fueron rescatadas por helicópteros. Tras una noche en vela, los vecinos recuperaron ayer la tranquilidad, una vez que el fuego quedó sofocado.Las cuadrillas de la Xunta trataban ayer de sofocar otros cinco incendios en la provincia de Lugo, el más grave en el municipio de Baralla, al que se desplazaron cuatro brigadas para impedir que el fuego devastase una zona arbolada. En Ourense continuaba activo un incendio en Castro Caldelas, y las cuadrillas lograron sofocar otro foco que durante cuatro días afectó al municipio de Padrenda.

Galicia ha vivido este verano la peor plaga de incendios de los últimos años. Según datos de la Xunta, el fuego ha arrasado 30.000 hectáreas de monte, la tercera parte de la superficie ardida en toda España. El éxito de su plan contraincendios, exportado a otras comunidades autónomas, era el orgullo del Gobierno de Manuel Fraga, del PP, quien, sin embargo, en los últimos días ha recibido duras críticas de los sindicatos y la oposición.

El pueblo de Pedro Bernardo, en Ávila, continúa con su trágica serie de incendios -la gran mayoría provocados-, que le ha llevado a perder, en 10 días, 3.200 de sus 3.600 hectáreas de monte público, en las estribaciones de la sierra de Gredos. Un trabajador de una cuadrilla murió en los trabajos de extinción del primero y más grave de los fuegos -que quemó 2.500 hectáreas- el pasado lunes. El presunto autor de este y otro fuego, P. M. G., de 23 años, vecino de Cebreros y pirómano reincidente, ha sido detenido y encarcelado por los hechos. El incendio declarado el sábado, también provocado y que se inició entre los términos de Pedro Bernardo y Lanzahita, fue controlado a primera hora de ayer tras arrasar 400 hectáreas. Sus dos focos estaban en un paraje conocido como La Abantera, el único que contaba todavía con vegetación tras el siniestro de la semana pasada y el enorme fuego -8.000 hectáreas- que asoló hace 14 años al pueblo. Dos personas resultaron heridas leves ayer durante los trabajos de extinción.

En la tarde de ayer se declaró en el paraje de Sierra Gorda de Cártama (Málaga) un incendio, todavía activo a última hora, que había arrasado 25 hectáreas.