Menese, que actuará con La Paquera y Familia Montoya, augura un futuro "horroroso" al flamenco
"El horizonte del flamenco no lo veo nada claro. Es más, como estamos en un país democrático, diría que me parece horroroso". Así de rotundo se mostró ayer el cantaor sevillano José Menese. Solera, el último de los recitales inspirados en los festivales que se ofrecerá hoy en Real Alcázar de Sevilla, reunirá en el mismo escenario a La Paquera de Jerez, que acaba de participar en la película Vengo de Tony Gatlif con la que se clausurará el Festival de Venecia, a Menese y a la Familia Montoya. La Bienal cerrará con llenos absolutos la primera recta de su programación.
José Menese (La Puebla de Cazalla, 1942), que se ha forjado en los festivales flamencos y ha sabido ganarse también al público de las universidades y los grandes teatros europeos, lanzó un consejo para las nuevas generaciones: "Hay que ser honrado con uno mismo. Cantar bien y punto, que después todo vendrá".El cantaor, que en octubre presentará un nuevo disco titulado Francisco como homenaje a su letrista y pintor Francisco Moreno Galván, le auguró un mal futuro al flamenco. "Esto se va a la deriva porque no se pone el interés que se debería, no salen jóvenes como los de antes", añadió Menese.
Tan tradicional como se confiesa José Menese es la cantaora Francisca Méndez La Paquera de Jerez que, a sus 66 años, continúa entregándose en cada recital. La Paquera acaba de participar en Vengo, la película que protagoniza Antonio Canales. "Ella representa el cante valiente y la entrega absoluta. Se parte el alma cada vez que sube al escenario y, todavía, se quita el micrófono de delante para hacer sus bulerías", comentó ayer Manuel Herrera, director de la XI Bienal de Flamenco.
Tras 15 años de silencio, la Familia Montoya volvió a los escenarios la pasada temporada. Con su presencia en la Bienal, en el mismo espacio en el que acturaron en 1986 con el espectáculo Menta y canela en el que también participaron Lole y Manuel, ratificarán su vuelta. "Hace 20 años costaba mucho trabajo poner a la gente de pie y nosotros lo conseguíamos. Ahora es más fácil, hay un público más joven y que sabe menos", comenta Carmelilla Montoya, la bailaora de la familia.
"Lo nuestro es el flamenco-flamenco. Como familia no podemos hacer otra cosa. Luego ya, cada uno de nosotros por separado puede meterse en cosa nuevas si quiere", añade Carmelilla. El grupo de Triana, que cuando nació en 1975 cautivó a la afición durante una década, cuenta con las voces de Antonia La Negra y su hija Angelita Montoya -hermana de Lole- y de Carmen Montoya, madre de la bailaora.
El grupo ha decidido volver pisando fuerte y está grabando un disco, que saldrá el próximo diciembre, después de un silencio discográfico de 20 años. "Mañana haremos algo del disco nuevo. Bulería de la feria, que es de Romerito de Jerez y la cantamos todas juntas, y Tangos de la naranja", adelanta Angelita Montoya. Las guitarras de Antonio Jero y Quique Paredes redondearán el último de los tres conciertos en el Real Alcázar.
Lugar: Real Alcázar de Sevilla.
Hora: 21.00.
Día: 7 de septiembre. Precio: 2.500 pesetas (Agotadas las localidades).
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