La Quincena dedicará a Verdi la próxima edición y escenificará 'Rigoletto'

La obra del Giuseppe Verdi centrará el programa de la edición de 2001 de la Quincena Musical de San Sebastián, que celebrará así el primer centenario de la muerte del compositor italiano. El director del festival, José Antonio Echenique, subrayó ayer el éxito rotundo registrado este año al haber logrado exhibir el cartel de completo en todos los conciertos celebrados en el nuevo auditorio del Kursaal, que el año próximo acogerá la ópera Rigoletto.

Encargo a Alberto Iglesias

La 62 edición de la Quincena Musical de San Sebastián estará dedicada a la recreación de la obra musical de Giuseppe Verdi para conmemorar el primer centenario de su fallecimiento. Y entre las actividades previstas en torno a su figura destaca la representación de la ópera Rigoletto bajo la dirección de Jesús López Cobos. Un proyecto que, además de su relevancia artística, tendrá también el especial significado de estrenar el auditorio del Palacio del Kursaal como sala de ópera, una vez superadas las deficiencias de equipamiento escénico que inicialmente tuvo el auditorio y que han retrasado su disponibilidad como escenario operístico.Jose Antonio Echenique adelantó ayer que el Rigoletto que proyecta la Quincena será una producción que "traslada la acción a un ambiente mafioso del Chicago de los años 20". En los papeles principales estarán la soprano granadina Maria José Cano, la revelación de la actual edición, en la que ha interpretado a Elvira de I Puritani de Bellini, y el tenor Aquiles Machado.

Verdi será también el protagonista del cartel de la próxima Quincena, que ha diseñado el pintor guipuzcoano, José Luis Zumeta. Y su extraordinario Requiem será interpretado por el Orfeón Donostiarra, que también lo va a cantar el próximo mes de enero en Berlín con la Orquesta Filarmónica de esta ciudad.

El protagonismo de Verdi en la proxima edición se compaginará con la permanencia de los ciclos dedicados a la obra de Mahler y Bach. El primero incluirá la Sinfonía nº 4 a cargo de la Sinfónica de Tenerife dirigida por Victor Pablo Pérez, mientras que el pianista Christian Zacharias continuará en su proyecto de ofrecer la integral de los conciertos para piano y orquesta de Mozart acompañado por la Orquesta de Cámara de Lausanna.

Por lo que respecta al ciclo de música actual, la Quincena ha encargado una obra al compositor donostiarra Alberto Iglesias y proyecta su estreno en la edición del 2001. A sus 44 años, Iglesias tiene un apretado curriculo, reconocido con dos premios Goya, como autor de la banda sonora de los últimos filmes de Almodóvar, asi como de los espectáculos de baile de Nacho Duato.Junto a este avance del programa de la próxima Quincena Musical, José Antonio Echenique destacó ayer, el éxito rotundo alcanzado por la edición que finalizó el pasado domingo. Sin concesiones a la retórica, el director del festival ofreció el balance en números: los 52.000 espectadores que acudieron a las 78 actividades programadas han supuesto una recaudación de 108 millones de pesetas, casi un tercio del presupuesto de la Quincena.

El festival ha superado con sobresaliente el reto que este año ha supuesto pasar del aforo que tenía el viejo teatro Victoria Eugenia, que no llegaba al millar de localidades, al nuevo Kursaal que, con sus dos auditorios de 1.850 y 638 butacas, duplica con creces la capacidad de espectadores. Echenique precisó ayer que el auditorio grande se ha llenado en los 16 conciertos ofrecidos y el pequeño en los 6 que han constituido el ciclo de música de cámara.

La nueva infraestructura del Kursaal ha permitido a la Quincena Musical pasar de los 45.000 espectadores que registró el pasado año a los 52.000 de éste. Este resultado permite a los organizadores programar con confianza espectáculos ambiciosos, a sabiendas de la fidelidad de un público que va en aumento.

La recaudación de 108 millones de pesetas, aumenta en 18 millones la del año pasado. La Quincena mantiene, junto a su presencia donostiarra, el programa en pueblos de Guipúzcoa, su cantera de espectadores.